Después de que la Administración Autónoma Democrática del Norte y el Este de Siria (AANES) declarara la movilización el 6 de julio, las asambleas de los distritos y cantones comenzaron los preparativos contra las amenazas y los ataques del estado invasor turco.

Los comités de mujeres, de salud, de defensa y de jóvenes formaron una oficina de crisis para hacer los preparativos en el distrito de Dirbesiyê del cantón de Hesekê, fronterizo con Turquía.

"El norte y el este de Siria atraviesan un proceso delicado después de que el Estado turco invasor haya aumentado sus amenazas y ataques contra la región. Es muy importante declarar la movilización contra los ataques, es una práctica común contra los peligros en todos los países", dijo el lunes Rûstem Bekir, copresidente de la Asamblea del Distrito de Dirbesiyê y miembro de la Mesa de Crisis.

Señalando que la región ha sido desgarrada por las guerras durante muchos años, Bekir dijo que la ocupación turca atacó todas las regiones del norte y el este de Siria, y que los asentamientos civiles fueron bombardeados también en el distrito de Dirbêsiyê.

La región se preparara para una guerra del pueblo revolucionaria

Bekir habló de sus preparativos: "Todas las organizaciones y comités, como el municipio, los comités de mujeres, de salud, de defensa y de la juventud, han hecho preparativos en los almacenes de alimentos y en los sótanos. Además, muchos centros de salud dentro y fuera del distrito han contribuido a los preparativos con su personal".

Bekir destacó que los habitantes de la región se prepararon para una guerra popular revolucionaria, y que la sociedad y los jóvenes desempeñan un papel importante en la protección de la región, ya que son la base de la revolución.

"Las fuerzas militares están preparadas para luchar contra el enemigo y proteger la región. El pueblo también está preparado para resistir sobre la base de una guerra popular revolucionaria. Se ha proporcionado el sustento necesario a todos los barrios y pueblos cercanos a la frontera", dijo Bekir.

Bekir señaló que las comunas se convertirán en una comunidad militar, política y social en guerra y llevarán a cabo actividades para organizar a los residentes de la región.