Más civiles secuestrados en el Afrin ocupado por Turquía

El ejército invasor turco y sus mercenarios siguen sembrando el terror en los territorios que han invadido en el norte y el este de Siria, violando el derecho internacional.

Los llamados mercenarios de Faylaq al-Sham afiliados al ejército turco han secuestrado a un residente de la aldea de Qerebaba, en el distrito de Sherawa de Afrin. La víctima con discapacidad fue identificada como Mesûd Omer Hîro, de 40 años.

En la aldea de Iska, en el distrito de Sherawa, Ebdo Birîmo, de 26 años, habría sido condenado a un año y medio de prisión y capturado. El joven fue condenado a prisión alegando que había practicado la autodefensa antes de la ocupación de Afrin.

Por otra parte, los mercenarios de Hayat Tahrir al-Sham secuestraron a Ehmed Ebdo en la aldea de Kebashin, mientras que Mihemed Kenco, de 34 años, fue secuestrado en la carretera Jindires-Shiye por los mercenarios de la llamada "Policía Civil".

El Estado turco ha establecido un régimen de terror en los territorios que ha invadido junto con los grupos yihadistas bajo su control. Crímenes como el secuestro, la ejecución, la tortura, el saqueo y la migración forzosa se han convertido en una rutina diaria y se cometen sistemáticamente crímenes de guerra, especialmente en el cantón de Afrin, ocupado desde marzo de 2018.

Los secuestros de civiles forman parte de la rutina diaria. En la mayoría de los casos, se exige un rescate para su liberación. En los últimos años, miles de personas han sido secuestradas y torturadas. Algunas han sido ejecutadas, el destino de otras es desconocido.

En los primeros seis meses de este año, los invasores secuestraron a 346 ciudadanos, 30 de los cuales eran mujeres, y mataron a 18 ciudadanos.

Por otra parte, cortaron 8.500 árboles y quemaron más de 100, y quemaron decenas de hectáreas de bosques y campos.

Tras la reunión de la OTAN en Madrid, España, el 30 de junio, el Estado turco ha incrementado sus crímenes contra la población del norte y el este de Siria, concretamente en las regiones que ha ocupado junto a los aliados yihadistas.

Según la Organización de Derechos Humanos de Afrin-Siria, Turquía ha incrementado sus crímenes de asesinato, secuestro y acoso a los ciudadanos en las regiones ocupadas con el fin de desplazar a la población local y socavar la seguridad de la región. Además, el Estado turco, que amenaza con invadir Til Rifat y Manbij, está atacando actualmente a la población civil con tanques, bombardeos y aviones de combate.