Otro grupo de desplazados por los ataques turcos es asentado en el campamento Washokani, cerca de Hesekê. El número de desplazados asentados en el campamento excede los 2.000, con alrededor de 200 con distintos problemas de salud.
Miles de personas han sido forzadas a desplazarse a causa de los ataques indiscriminados del ejército turco y sus aliados mercenarios que buscan invadir el nordeste de Siria desde el pasado 9 de octubre.
Según la oficina de Servicios Sociales de la Administración Autónoma del Norte y el Este de Siria, 478 civiles han caído mártires y otros 1.070 han resultado heridos a consecuencia de los ataques, con más de 300.000 desplazados.
La Administración Autónoma ha construido el campamento Washokani, que se encuentra a unos 12 km al oeste de Hesekê, para dar refugio a los desplazados.
474 familias de Serêkaniyê (Ras al-Ain) y Zigran han sido asentadas en el campamento. Con la llegada del último grupo, la población total asciende a 2.195.
Otros 720 refugiados son niños entre 1 y 17 años de edad, mientras que hay 49 personas mayores por encima de los 60 años.
De los desplazados internos asentados en el campamento, 196 sufren de parálisis, diabetes, alta presión sanguínea y enfermedades cardíacas. Hay también dos personas con cáncer: Fewzi Ehmed y Xezalê Cemîl Sino.
Las personas con problemas de salud reciben tratamiento en el gabinete de salud instalado por Heyva Sor a Kurd en el campamento.
Ciwan Seid, de la Coordinación de Salud de Heyva Sor a Kurd, ha denunciado que no han recibido ningún apoyo de organizaciones internacionles.
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