'Nuestro pueblo está dispuesto a sacrificar su vida por sus tierras'

El co-presidente del Consejo Ejecutivo de la Región del Éufrates, Nihad Ahmed, subrayó que el pueblo del noreste de Siria hará todo lo posible para defender su tierra.

Amenazando con ocupar más zonas en el norte y el este de Siria, el Estado turco se centra en las zonas de Tal Rifat y Manbij, que representan los puntos clave para entrar en las zonas de la Administración Autónoma.

En declaraciones a ANHA sobre la última ola de ataques acelerados en la región, el co-presidente adjunto del Consejo Ejecutivo de la Región del Éufrates, Nihad Ahmed, declaró que Turquía pretendía ocupar el noreste de Siria para eliminar su proyecto democrático que reúne a todos los componentes bajo un mismo techo.

 

Ahmed señaló que el pueblo de la región tiene derecho a liberar sus territorios invadidos por Turquía y mercenarios aliados bajo la mirada de la comunidad internacional.

"La defensa es un deber sagrado para todos los que rechazan la injusticia y la esclavitud. Las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) también tienen derecho a defenderse", señaló.

Según Ahmed, los ataques de Turquía no se dirigen únicamente a las zonas de la Administración Autónoma, ya que Turquía planea un plan de ocupación de nuevas partes de las tierras sirias. Por ello, el gobierno de Damasco debe defender las regiones amenazadas, así como a los países garantes, añadió.

"El Estado turco ve el hecho de que nada es como antes. Los habitantes de la región han tomado conciencia y están dispuestos a sacrificar sus vidas para defender sus tierras", subrayó.

Advirtiendo que una nueva guerra sólo significaría volver al inicio de la crisis en 2011, Ahmed añadió: "Es el Estado turco ocupante el que se aprovecha de esto, ocupa las tierras y las casas de la gente en Siria y desplaza a la población local."

Ahmed señaló que Turquía buscó prolongar la crisis en Siria para anexar una nueva parte de las tierras sirias a las suyas. "Ya es hora de que los sirios trabajen para encontrar una solución a la crisis. Hay que sacar lecciones de esta experiencia sangrienta que se prolonga desde hace 11 años. La gente debe unirse y establecer la unidad para que se puedan evitar los ataques dirigidos a sus tierras y para que las personas que fueron desplazadas y obligadas a emigrar puedan volver a sus hogares."