La gestión del campamento de Hol en el norte de Siria hizo un llamado a la comunidad internacional sobre la situación de los niños. Hay miles de familias del ISIS que viven en el campamento con sus hijos, y la situación está fuera de control en muchas áreas debido a los ataques de Turquía. Los niños están adoctrinados con las ideas del ISIS. Así, una nueva generación de yihadistas amenaza con crecer.

Según la dirección del campamento, 68.223 personas viven en el campamento, que se encuentra a unos 40 kilómetros al oeste de Hesekê, en el norte de Siria, 44.440 de los residentes del campamento son niños y adolescentes, 18.079 de los menores son de Siria, 19.203 de Irak y 7.158 de otros países, 224 son huérfanos, y 104 viven en alojamientos protegidos.

"El futuro de todos los niños en el campamento es incierto", explicó la administración del campamento. La mayoría de los huérfanos ni siquiera se han registrado hasta ahora, ya que se los ha colocado con otras familias o parientes, que a menudo continúan educándolos de acuerdo con las reglas del ISIS. La dirección del campamento señaló una serie de peligros a los que están expuestos los niños.

En particular, el trauma causado por las masacres y la tortura del ISIS es un problema importante, indicó la administración del campo y agregó: "El ISIS separó a estos niños de sus familias y les dio entrenamiento militar. Temen su futuro y están indefensos en todos los aspectos. Los huérfanos encuentran la vida en el campo particularmente difícil y se niegan a asistir a la escuela o participar en actividades sociales. Los niños adoctrinados por el ISIS consideran a los otros niños como "infieles".

Una gran proporción de los niños están enfermos. Como hay pocos especialistas y los centros de salud están a punto de estallar, las tasas de infección están aumentando.

Como los niños no son enviados a la escuela y no hay infraestructura para controlar la asistencia a la escuela, los niños carecen de acceso a la educación.

Una gran proporción de los niños en los orfanatos tienen tres años o menos. Como los cuidadores no saben quiénes son los niños y de dónde provienen, es difícil establecer una comunicación exitosa.

Algunos de los niños viven con familiares que los cuidan o con familias que los adoptaron. Pero dado que esta medida es solo temporal, necesitarán un orfanato después".

La administración del campamento continuó: "Estamos muy preocupados por el futuro de los huérfanos aquí. Como no tenemos suficientes lugares para el orfanato, nos resulta difícil establecer contacto con los niños. Los equipos de atención no están capacitados profesionalmente. los equipos pueden informar a los niños sobre los problemas de salud, pero no pueden brindar atención psicológica a los niños, lo que se necesita con urgencia.

La administración autónoma ha asumido la responsabilidad de los niños y propone abrir varios centros para niños y jóvenes con la ayuda de organizaciones y asociaciones y brindar atención profesional. Su objetivo es alentar a los niños a construir relaciones con otros niños y cambiar su perspectiva de esta manera. Además, se pretende asegurarles un futuro.

Llamado a la comunidad internacional

“Además, como líderes del campamento, pedimos a los gobiernos y estados que se comuniquen con la administración autónoma, especialmente con respecto a los niños. Creemos que la situación actual en el campamento, aunque sea temporal, está afectando el desarrollo personal de los niños. La Administración Autónoma ha enfatizado repetidamente que está buscando una solución para los niños extranjeros. La solución preferida es enviarlos a sus países", expresaron finalmente desde el campamento.