En los últimos tres días, delegaciones rusas y francesas han llegado a Qamishlo para reunirse con funcionarios de la Administración Autónoma del Norte y el Este de Siria (AANES) y repatriar a las familias de los miembros del ISIS retenidas en los campamentos de al-Hol y Roj.

Según el Centro de Información de Rojava (RIC), la delegación rusa, de la que forma parte la Comisaria del Presidente de Rusia para los Derechos del Niño, Maria Lvova Belova, ha repatriado a 38 niños rusos, la mayoría de los cuales, al parecer, son huérfanos.

Esta es la cuarta delegación rusa de repatriación de 2022, y eleva a 68 el número total de ciudadanos rusos repatriados este año, todos ellos niños y niñas.

Se calcula que 4.500 rusos llegaron a Siria para luchar junto al ISIS durante el periodo del califato. Algunos trajeron a sus hijos e hijas con ellos, otros tuvieron hijos después de llegar. Desde que Rusia comenzó las repatriaciones en 2018, 350 personas (todos niños y niñas) han sido repatriados.

Por su parte, la delegación francesa, encabezada por Stéphane Romatet, jefe del centro de Gestión de Crisis y apoyo del Ministerio de Asuntos Exteriores francés, ha repatriado a 40 niños y a 15 mujeres.

Se calcula que 1.300 franceses llegaron a Siria e Irak para unirse al ISIS durante el califato. Francia ha repatriado ya un total de 133 franceses, 101 de ellos niños y niñas, desde que comenzaron las repatriaciones en 2019.