El Comando General de las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) publicó una declaración en el tercer aniversario de la eliminación de los últimos bastiones de ISIS y el anuncio de la eliminación final de su llamado Califato.

La declaración publicada por el Centro de Prensa de las SDF el miércoles incluye lo siguiente:

"Hoy, 23 de marzo, se cumple el tercer aniversario de la eliminación de los últimos bastiones del ISIS y el anuncio de la eliminación final de su llamado Califato, después de años de lucha sin parangón, constante y con apoyo mundial de nuestras fuerzas y pueblo en el norte y el este de Siria, que finalmente culminó con la gloria y el honor de librar al mundo del mayor peligro que preocupaba a la región y al mundo en su presente y futuro.

En esta ocasión y al principio, recordamos a nuestros mártires, sin cuyos sacrificios, esta gran victoria no se haría. Y recordamos a nuestros valientes combatientes y a nuestro fuerte pueblo, que defendió con determinación sus valores morales y humanitarios contra la organización terrorista y sus partidarios, a pesar del modesto potencial militar y de seguridad y de las múltiples amenazas de los estados regionales que han ido en dirección contraria a la guerra contra el ISIS.

Sin duda, la eliminación sobre el terreno y militar del califato del ISIS en al-Baguz, su último bastión, ha reavivado las posibilidades de supervivencia de millones de personas en nuestras regiones y en el mundo. Nuestras fuerzas desempeñaron el papel de salvadoras del mundo cuando el ISIS alcanzó su etapa más peligrosa hasta el punto de que el mundo perdió en algún momento la esperanza de controlar y detener su expansión, y se limitó a observar sus brutales y terribles crímenes contra los seres humanos, la historia y la naturaleza. Cada persona, cada ciudad y cada pueblo de la región tiene su propia historia dolorosa e inolvidable que sacude la entidad de la humanidad. Por lo tanto, la conmemoración de nuestros mártires y sus grandes sacrificios para librar a la humanidad del terrorismo del ISIS es un deber moral universal que corresponde a cada ser humano libre y responsable de nuestras regiones.

En este sentido, nos referimos a los peligros inminentes que sigue planteando el ISIS, en particular sus células terroristas, y reiteramos que la organización terrorista está tratando de revivir sus sueños de nuevo al tratar de controlar algunas áreas en Siria e Irak y formar un punto de apoyo para expandirse y atraer elementos potenciales en el mundo. Los recientes atentados contra la prisión de al-Sina'a en la ciudad de al-Hasaka confirmaron lo que hace tiempo nos advirtieron sobre el peligro de que la comunidad internacional se desentienda y ralentice la resolución de este expediente, el más importante de los cuales es el de las prisiones y los campos que albergan a los detenidos y las familias del ISIS, así como la falta de apoyo adecuado para la reconstrucción de la zona dañada por el ISIS y las batallas para expulsar al ISIS.

Por lo tanto, destacamos que la inacción de la comunidad internacional, la negligencia de algunos Estados y la ausencia de un plan internacional claro y global a largo plazo aumentan las pérdidas humanas y materiales y permiten al ISIS fortalecer su organización, chantajear e intimidar a parte de las comunidades locales, impidiéndoles participar en los esfuerzos de eliminación de las ideas extremistas y secando el ambiente ideológico. Además, atraen a nuevos elementos locales y extranjeros en el espacio abierto de la propaganda incendiaria en nombres y plataformas ficticias. Hay que señalar la estrechez de miras de algunos países y su falta de voluntad para asumir sus responsabilidades repatriando a sus nacionales de los detenidos y familias del ISIS del norte y el este de Siria. Además de la falta de asistencia necesaria para establecer un tribunal internacional en nuestras regiones. Estos planteamientos perjudican los esfuerzos realizados durante los últimos años en la guerra contra el ISIS y aumentan la capacidad del ISIS para superar sus profundos reveses.

Sobre esta base, el SDF pide una vez más a todos los países de la coalición internacional para luchar contra el ISIS que proporcionen más apoyo a nuestras fuerzas en su guerra a largo plazo y que desarrollen una estrategia militar, de seguridad y política clara para evitar el resurgimiento de la organización terrorista, y pedimos a la comunidad internacional que proporcione una asistencia adecuada y duradera a los pueblos del norte y el este de Siria apoyando la seguridad, la estabilidad y el desarrollo económico y comunitario.