El lunes, una tormenta de arena provocó que partes de la región de Cizire, en el noreste de Siria, desaparecieran bajo una espesa capa de polvo. El aire gris hacía que los edificios residenciales y comerciales fueran apenas visibles desde unos pocos cientos de metros de distancia.

El Comité de Ecología de la Administración Autónoma del Norte y Este de Siria (AANES) habló de vientos polvorientos en la superficie con visibilidad horizontal limitada en varias áreas de Cizire. En Heseke, algunas personas tuvieron que ser tratadas en hospitales debido a problemas respiratorios. El gobierno local pidió a la población quedarse en casa en la medida de lo posible y usar ropa y gafas de protección en el exterior.

El calor intenso y la escasez de precipitaciones debido al cambio climático desencadenan tormentas de arena más frecuentes en el norte y el este de Siria, especialmente en primavera y otoño. En mayo, siete personas murieron en una fuerte tormenta en Deir ez-Zor, en el este de Siria.