El monasterio de San Bartolomé en el distrito de Başkale de Van está condenado a la decadencia final. En 2011, la oficina del gobernador anunció la restauración del monasterio armenio, pero esta decisión no se ha aplicado en los últimos diez años.

El monasterio de la Iglesia Apostólica Armenia fue construido en el siglo XIII en la entonces provincia armenia de Vaspurakan y abandonado durante el genocidio de los armenios de 1915. Las ruinas del monasterio se encuentran a 23 kilómetros del distrito de Başkale, en una colina a unos 2.000 metros de altitud. Según la tradición, el monasterio se construyó en el lugar del martirio de Bartolomé. Se dice que fue uno de los apóstoles que llevaron el cristianismo a Armenia en el siglo I. Junto con San Tadeo, San Bartolomé es considerado el patrón de la Iglesia Apostólica Armenia. El edificio del monasterio aparece por primera vez en inscripciones en 1398. Los edificios fueron reconstruidos o restaurados en 1755 y 1878. El complejo del monasterio podría datar del siglo XIII o de los primeros tiempos del cristianismo.

Durante el Genocidio Armenio, el monasterio pasó a estar bajo el control del ejército turco entre 1915 y 1916 y, desde entonces, se encuentra en los terrenos de una base militar, que se utiliza como base de una unidad militar especial desde la década de 1990. El complejo del monasterio resultó gravemente dañado por un terremoto en 1966. La cúpula de la iglesia estuvo intacta hasta la década de 1960, pero desde entonces toda la estructura está muy arruinada y la cúpula ha desaparecido. Tras el traslado de la base militar a otro lugar, el emplazamiento ha pasado a manos del Ministerio de Cultura turco.

"Se están destruyendo los valores de la Mesopotamia"

El presidente de la Asociación Medioambiental de Van, Ali Kalçık, considera el deterioro como una continuación del genocidio según la mentalidad: "En el pasado destruimos a los armenios, ahora tenemos que borrar también su historia". El presidente de la asociación declaró a ANF que ha presionado en vano a las autoridades para que preserven el monasterio: "Hemos redactado varios informes sobre esta cuestión, pero como organización no gubernamental nuestros esfuerzos no son suficientes. En Van se está destruyendo toda la historia. Los saqueadores y los habitantes de los pueblos de la zona han acelerado el deterioro de la iglesia excavando. La anunciada restauración no se ha llevado a cabo y mientras tanto sólo queda en pie una pared de la histórica iglesia. Todos los grupos sociales deberían trabajar por la conservación del patrimonio histórico de la región. Según la ideología oficial, siempre hay tesoros enterrados bajo las cruces del cristianismo. Esta forma de pensar tiene consecuencias devastadoras. Los valores de Mesopotamia se destruyen como resultado".