Abogado Özen: "No hay explicación legal para el aislamiento de Öcalan"

El abogado dijo que el aislamiento es tortura y un delito que no está sujeto a prescripción. Özen enfatizó que el sistema que apunta a Öcalan no tiene una explicación legal y pidió a todos los grupos democráticos y al público que sean sensibles.

En declaraciones a ANF, el abogado Şivan Özen declaró que el aislamiento es un sistema de tortura que tiene como objetivo separar a los presos de la vida y los valores en un intento de eliminar su existencia social. Señaló que el aislamiento impuesto al líder del pueblo kurdo Öcalan está destinado a apuntar a su papel social y político. Señaló que millones de personas consideran a Öcalan como su voluntad política y su líder.

"Las personas tienen derecho a reunirse con sus familiares y abogados. Además, permitir periódicos y libros protege la existencia de una persona. Sin embargo, no es posible reunirse con Öcalan. Las sanciones disciplinarias impuestas no son legales ni legítimas. Por lo tanto, no hay explicación legal para la situación actual”, dijo Özen.

Sin estatuto de limitación

Özen enfatizó que “no existe un plazo de prescripción en los casos de tortura, terminan con la muerte. Aquellos que son parte del sistema en Imralı están cometiendo un delito que no está sujeto a prescripción y definitivamente serán llevados a los tribunales algún día".

La huelga de hambre es una acción de protesta

Tras señalar que la huelga de hambre es el último recurso que un preso puede querer hacer, Özen continuó: “La huelga de hambre es un acto de protesta y está dentro del alcance de la libertad de expresión. Las demandas de los presos que han estado realizando huelgas de hambre durante 120 días deben tomarse en serio y debe garantizarse que la familia y los abogados de Öcalan lo conozcan. Todos los círculos democráticos deben llamar la atención sobre este aislamiento y la prohibición de las reuniones entre abogados y familiares. Tenemos que luchar por los valores democráticos. Los activistas urbanos, todos los partidos socialistas de izquierda y las organizaciones no gubernamentales deben asumir la responsabilidad de poner fin a esta situación”.