El periodista Aziz Oruç, que está recluido en la prisión cerrada de Patnos, informó de las diferentes violaciones de sus derechos.

Oruç, que se puso en contacto por teléfono con su mujer Hülya Oruç el 27 de abril, declaró que las medidas adoptadas contra el riesgo de coronavirus (Covid-19) eran insuficientes y que tenían problemas para acceder a los materiales de limpieza. "Todavía nos duchamos con agua fría o tibia en la prisión de Patnos", le dijo a su esposa.

Oruç también confirmó que tienen problemas para enviar y recibir cartas, aunque oficialmente no están prohibidas. "Sólo podemos llamar por teléfono un día a la semana. En realidad, no han prohibido las cartas. No debería haber problemas para enviar y recibir cartas. Envié una carta y una foto el 6 de abril. Pero las cartas no se entregan. A pesar de que he estado escribiendo peticiones para saber lo que pasó con ella, no se dio ninguna respuesta."

Declarando que tienen serios problemas con la limpieza y el acceso a los materiales de limpieza en la prisión, Oruç declaró que "el Ministro de Justicia dijo proporcionarían todos los productos de limpieza. Sin embargo, sólo se da un jabón por semana. Durante este período, hay importantes problemas para comprar los productos que queremos en la cantina. Además, puedo decir el agua caliente es muy necesaria debido al virus, pero todavía tenemos que ducharnos con agua fría".

Oruç también habló de las dificultades para ser trasladado al hospital. "Tuve un problema serio debido a la migraña. Antes del brote de coronavirus, fui a la enfermería unas cuantas veces y pedí que me transfirieran al hospital, pero esto fue rechazado. Actualmente estoy usando un medicamento. Tengo serios dolores en los ojos y en la cabeza debido a la lectura de libros y a la escritura. No hay ninguna condición para recibir un tratamiento adecuado o para ser remitido al hospital".