El profesor y activista cultural kurdo Ebrahimi comienza a cumplir condena en prisión en Sine

Un conocido activista cultural ha comenzado a cumplir su condena de prisión en Sine. Seyvan Ebrahimi, de la organización sociocultural Nojîn, debe cumplir una condena de un año de prisión y recibir 40 latigazos.

Un conocido activista cultural comenzó su condena de prisión en Rojhilat. Según informó el domingo la organización de derechos humanos Red de Derechos Humanos del Kurdistán (KHRN), Seyvan (también escrito Saywan) Ebrahimi fue acompañado el sábado frente a la prisión central iraní de la ciudad de Sine (Sanandaj). El kurdo deberá cumplir una condena de un año de cárcel y recibir 40 latigazos. Fue condenado en agosto.


Seyvan Ebrahimi es profesor de kurdo y forma parte de la junta directiva de la organización sociocultural Nojîn (también Nozhin o Nûjîn). Esta asociación, con sede en Sine, ofrece clases de literatura y lengua kurdas y promueve otras iniciativas de la sociedad civil y la educación, especialmente en regiones remotas sin escuelas. De este modo, los niños desfavorecidos reciben también una educación elemental que les ayudará en su futuro camino en la vida.


La sentencia contra Ebrahimi, que fue detenido temporalmente a principios de año, se basa en acusaciones de actividades subversivas y está relacionada con su trabajo para fortalecer la sociedad kurda, marginada y oprimida por el gobierno central iraní, así como con iniciativas para la liberación de su esposa Zara (también deletreada Zahra) Mohammadi, que en ese momento seguía encarcelada. La mujer, de 33 años, dirige la organización Nojîn. En 2021 fue condenada a cinco años de prisión, también por presuntos delitos contra la seguridad nacional. Fue puesta en libertad inesperadamente el pasado febrero.

La justicia del régimen iraní ha dictado otra condena contra Seyvan Ebrahimi por actividades subversivas. La sentencia se dictó a principios de diciembre y exige once años de cárcel. El veredicto consta de dos condenas individuales. Ebrahimi fue condenado a diez años de cárcel por un tribunal revolucionario de Sine por "formar un grupo con el objetivo de perturbar la seguridad nacional". Se le impuso otro año de cárcel por "propaganda contra el Estado". La sentencia contra Ebrahimi aún no es firme. Sin embargo, la KHRN espera que se confirme en los próximos meses, y que no vuelva a salir en libertad hasta 2034. Según la legislación iraní, si una persona es condenada a varias penas de prisión, sólo debe cumplir la más larga. El tiempo que Ebrahimi pasaría entre rejas sería efectivamente de 11 años si el último veredicto contra él fuera firme.