El ECHR ignora la tortura cometida contra el líder kurdo Öcalan

El ECHR evaluó la apelación del sobre el líder del pueblo kurdo, Abdullah Öcalan, y argumentó que no hay pruebas suficientes de que haya sido torturado.

El Tribunal Europeo de Derechos Humanos anunció que ha rechazado, 8 años después, la apelación presentada en 2010.

La apelación presentada el 2 de marzo de 2010 ante el ECHR subrayó la violación del Artículo 2 de la Convención Europea de Derechos Humanos sobre el derecho a la vida, el Artículo 3 sobre la prohibición de la tortura, el Artículo 6 sobre el derecho a un juicio libre, el Artículo 13 sobre el derecho a un recurso efectivo y el artículo 14 relativo a la prohibición de la discriminación.

CPT, la organización que legitimia Imrali 

El tribunal mencionó que el Comité para la Prevención de la Tortura (CPT) se reunió con Öcalan en enero de 2010 y elaboró un informe que decía que "no fue sometido a torturas".

Los informes publicados por el CPT tras su visita a Imrali en enero de 2010 habían argumentado que las condiciones materiales del arresto de Öcalan eran "generalmente aceptables" y optaron por legitimar la situación.

Se espera que el ECHR haga público el veredicto más detallado durante el día.

Historia del caso

El caso presentado en el ECHR trata sobre el ataque y la amenaza de muerte al íder del pueblo kurdo durante un registro en 2008. En octubre de 2008, los abogados de Öcalan y 236 prisioneros apelaron ante la fiscalía de Bursa alegando que Öcalan había sido torturado y amenazado de muerte. .

En una rueda de prensa celebrada el 18 de octubre de 2008, los abogados de Öcalan dijeron: "La habitación de Öcalan fue completamente revuelta por guardias con la excusa de que estaban realizando un registro. Él mismo fue sacado de la habitación y llevado a la celda de al lado. Cuando se opuso, le dijeron: "Cállate, no puedes hablar, no tienes derecho a pronunciar una palabra." Dos guardias lo tomaron por los brazos, otro lo empujó por detrás y lo obligaron a arrodillarse. Este es un método de tortura. Cuando respondió: "Prefiero morir antes que ser tratado de esta manera", uno de los guardianes dijo: "Ese momento también llegará", amenazando a su persona.

Se realizaron protestas en las calles durante los días posteriores a este ataque, tras el cual dos de los guardianes que atacaron a Öcalan fueron sometidos a una audiencia disciplinaria que al final no repercutió en nada. El Tribunal Penal de Yalova rechazó la apelación en julio de 2009. No hay autoridad legal en Turquía que pueda inspeccionar las condiciones en Imrali.

La apelación presentada el 2 de marzo de 2010 ante el ECHR subrayó violaciones del Artículo 2 de la Convención Europea de Derechos Humanos sobre el derecho a la vida, el Artículo 3 sobre la prohibición de la tortura, el Artículo 6 sobre el derecho a un juicio libre, el Artículo 13 sobre el derecho a un recurso efectivo y el artículo 14 relativo a la prohibición de la discriminación.

Complicidad del ECHR y el CPT  

El silencio de los gobiernos occidentales y las organizaciones internacionales en los últimos años frente al aislamiento en Imrali ha sido confirmado con el veredicto del ECHR. El Comité para la Prevención de la Tortura (CPT) del Consejo de Europa preparó un informe sobre su visita hace dos años, en lugar de identificar las condiciones actuales.

El informe del CPT, basado en una visita en 2016, expresó su preocupación de que Öcalan y otros presos no tuvieran contacto con el mundo exterior y añadió que la situación estaba empeorando. El CPT había pedido a las autoridades turcas que tomaran precauciones para permitir que los presos se reunieran con sus familiares y abogados cuando lo desearan. A pesar de estos puntos, el estado turco nunca implementó ninguna de las sugerencias dadas.

El CPT legitimó el aislamiento y las condiciones inhumanas en Imrali con este informe, mientras que los veredictos de Tribunal en los últimos años han aumentado el silencio. El último veredicto del ECHR llega en un momento en el que el régimen fascista continúa institucionalizándose y el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, busca mejorar las relaciones con Europa.

El Tribunal emitió un veredicto en 2014 rechazando la apelación que los abogados de Öcalan hicieron al añadir documentos al caso en 2007 sobre el estado que desea "matar lentamente a Öcalan en prisión por envenenamiento", según informes médicos proporcionados por el gobierno turco y los documentos del CPT. El ECHR había argumentado que las condiciones de su confinamiento eran compatibles con el Convenio Europeo de Derechos Humanos después de 2009. Aunque todavía no se entiende cómo el aislamiento se puede ajustar a los derechos humanos.

Legitimando el aislamiento

El veredicto de Tribunal llegan en un momento en que el aislamiento impuesto sobre Öcalan es más estricto que nunca. Öcalan no ha podido reunirse con sus abogados desde 2011, y ha estado completamente desconectado del mundo exterior desde abril de 2015.
El último llamamiento presentado por su familia en septiembre fue rechazado porque Öcalan recibió un castigo disciplinario. La Fiscalía anunció que no permitirán ninguna reunión debido a la sanción disciplinaria. Ni la familia, ni los abogados de Öcalan, recibieron información acerca del castigo.