Hanım İş, una reclusa encarcelada en la prisión cerrada de mujeres de Diyarbakır, fue sacada de su celda el 25 de febrero por la administración de la prisión bajo el pretexto de que había llegado su abogado.
Sin embargo, Hanım İş fue recibida por un oficial de inteligencia que mantuvo una reunión muy desagradable con ella. Entre otras cosas, le dijo que debía espiar a las demás presas.
İş, que rechazó enérgicamente convertirse en informante, abandonó la reunión antes de que finalizara.
Se ha sabido que İş, que ha declarado que lo que se había hecho era ilegal, presentará una denuncia penal tanto contra la administración de la prisión como contra la persona que vino en nombre del servicio de inteligencia.