La iniciativa Justicia para Roboski ha hecho una declaración frente a la sede de la Asociación de Derechos Humanos (IHD) en Ankara, en Turquía, en el 127º mes desde la masacre de Roboski. Numerosos defensores de los derechos humanos han participado en la rueda de prensa durante la que se ha desplegado una pancarta en la que podía leerse: “Que se encuentre a los asesinos, Roboski nunca más”.

Pronunciando un discurso durante la protesta, Tanju Gündüzalp señaló que el pueblo de Roboski lleva 10 años, 127 meses, 552 semanas y 3.865 días buscando justicia. Gündüzalp dijo que la investigación sobre la masacre se cerró con la decisión de no enjuiciamiento. Dijo que el expediente estaba condenado a una política de impunidad, y que las autoridades han tratado de encubrir la masacre durante 10 años: “Roboski es un símbolo de la injusticia que destruyó la vida de nuestra gente, que se ganaba la vida haciendo negocios con sus familiares que fueron torturados mientras vivían en sus propias aldeas en los años 90, emigrando desde sus propias tierras en Turquía hacia el sur. Como en los asesinatos de los famosos años 90, todo el mundo conoce la responsabilidad del sistema. Sin embargo, en todos los asesinatos y masacres, y la de Roboski no es una excepción, siempre se tapa la verdad. La Masacre de Roboski es una prueba de fuego sobre los límites del Estado, la democracia y la reparación”, dijo.

Gündüzalp denunció que los responsables están siendo protegidos por el Estado: “Un crimen contra la humanidad fue cometido por los gobernantes y representantes políticos con los impuestos pagados por nuestro propio pueblo. Los responsables acabarán saliendo a la luz. No se puede construir un futuro sin confrontar el pasado, no se puede establecer un orden justo. La justicia no llegará a Turquía si no se hace justicia en Roboski. El presupuesto del Estado debe destinarse a la paz, no a las armas/guerra. El camino hacia la ‘Paz y la Justicia’ en estas tierras pasará primero por Roboski. Roboski es la vergüenza de estas tierras, una herida sangrante y una búsqueda incesante de justicia”.