Las familias de los presos piden que “todas las madres se levanten”
Las familias de los presos en Turquía y el Kurdistán del Norte iniciaron una vigilia para exigir justicia, asegurando que continuarán en la lucha hasta que sus hijos sean libres.
Las familias de los presos en Turquía y el Kurdistán del Norte iniciaron una vigilia para exigir justicia, asegurando que continuarán en la lucha hasta que sus hijos sean libres.
La vigilia por la justicia iniciada por las familias de los presos enfermos y de quienes no han sido liberados a pesar de haber cumplido la totalidad de sus condenas en Turquía, continúa en su 105º día en el Colegio de Abogados de Van. Aslıhan Timur, madre de Botan Timur, quien se encuentra en la prisión tipo F de Van, es quien lleva adelante la vigilia. Representantes del del Partido Democrático de los Pueblos (HDP) en el distrito de Muradiye visitaron a las familias el miércoles.
El co-presidente del distrito, Mehmet Emin Ulutaş, dijo: “Hay torturas en las cárceles. Los presos enfermos están en estado grave. A pesar de los informes que afirman que ‘no pueden permanecer en prisión’, los detenidos enfermos siguen sin ser liberados. No aceptamos esta ilegalidad. Los presos deben ser tratados con dignidad. Estamos en contra de la opresión”.
La madre del preso Botan Timur, Aslıhan Timur, habló de su llamada telefónica semanal con su hijo: “Mi hijo me dijo: ‘Mamá, nuestras celdas son asaltadas por la noche. Tiran nuestros objetos al suelo. Nos confiscan los bolígrafos, los libros y los cuadernos’. No aceptamos la injusticia cometida contra nuestros hijos. Luchamos por la justicia, pero en este país no hay justicia. Apoyadnos. No aceptamos la opresión en las cárceles. Como madres, debemos levantarnos ahora. Las madres no pueden seguir permaneciendo quieras en sus casas, tienen que venir a luchar con nosotras”.
Izmir
La Vigilia de la Justicia, iniciada por los familiares de los presos en el Colegio de Abogados de Izmir, suma ya 35 días.
Hablando en la vigilia el miércoles, Sultan Yağmekan dijo que visitó a Abdullah Güney en la prisión de Kırıklar el 25 de marzo. Güney le dijo a Yağmekan: “La voz de la acción de las madres llega a las cárceles. Como madres, su demanda de justicia para los presos es muy significativa. Después de que terminara la huelga de hambre contra la mejora de las condiciones penitenciarias en Kırıklar, no se tomó ninguna medida. No se cumplieron las promesas de mejorar las condiciones. No nos quedaremos en silencio ante esta represión y violación de derechos. Nuestras acciones continuarán”.