Se están llevando a cabo numerosas acciones en el marco de la campaña política "Libertad para Abdullah Öcalan y solución política a la cuestión kurda". El 27 de noviembre, presos del PKK y del PAJK iniciaron una huelga de hambre. Al mismo tiempo, los familiares, especialmente las madres de los presos, llevan a cabo vigilias por la justicia. La vigilia en Amed (Diyarbakır) organizada por la asociación de solidaridad con los presos TUAY-DER tienen lugar en el edificio del partido DEM en el distrito de Bağlar. ANF habló con las mujeres que participan en la vigilia.
"Queremos paz y justicia"
Afife Kartal, madre del preso político de Antalya Muhammet Kartal, ha declarado: "Estuve visitando a mi hijo la semana pasada. La moral de los presos era buena, pero hay represión, opresión e injusticia contra ellos por parte de las autoridades penitenciarias. Mi hijo perdió seis kilos en los diez días que estuvo en huelga de hambre. Por desgracia, la administración penitenciaria no sigue los procedimientos que debería aplicar a los presos en huelga de hambre. Los presos en huelga de hambre no reciben ni agua ni sal. Los presos tienen que beber agua del grifo. Queremos justicia. Nosotras, las madres, decimos: justicia, justicia, justicia. Queremos que Rêber Apo [Abdullah Öcalan] pueda recibir visitas de sus abogados y de su familia. Queremos que termine el aislamiento de nuestro representante. Si termina el aislamiento de Rêber Apo, terminará también el aislamiento de nuestros hijos. Sólo queremos justicia y paz. Mientras continúe la huelga de hambre iniciada por nuestros hijos e hijas, continuaremos la vigilia. Difundamos juntos esta campaña".
"No aceptamos esta injusticia"
Zekiye Yılmaz pidió un apoyo más amplio a la acción. Dijo: "Queremos que esta tortura termine en Turquía. Dicen que hay justicia en este país, pero nosotros no vemos justicia. Sean cuales sean los derechos de las personas encarceladas, queremos que nuestros hijos también los tengan. Están utilizando la ley del enemigo contra nosotros. Nuestros hijos son torturados y acosados en las cárceles. Somos madres, y se nos rompe el corazón cuando vemos a nuestros hijos así. Detienen ilegalmente a nuestros hijos e hijas. Como madres, nunca aceptaremos esta injusticia. Estamos aquí para apoyar la resistencia de nuestros hijos. No pondremos fin a la vigilancia de la justicia hasta que se cumplan las demandas de nuestros hijos".
"El aislamiento es un crimen contra la humanidad"
Fatma Adak añadió: "Condenamos el actual aislamiento de Rêber Apo. No aceptamos que se mantenga a los presos políticos en régimen de aislamiento. En primer lugar, queremos que se levante el aislamiento de nuestro representante y de nuestros hijos en prisión. Estamos aquí para apoyar a nuestros hijos e hijas encarcelados. Desde aquí, hago un llamamiento a todo nuestro pueblo para que apoye nuestra acción. Lo que el Estado nos está haciendo es una injusticia. No aceptamos esta opresión. El pueblo kurdo debe defender su voluntad. Creo que nuestra acción terminará con éxito".
"La lucha continúa"
Fatma Çağır subrayó que el aislamiento total de Öcalan, que dura ya tres años, debe terminar de inmediato y continuó: "Estamos aquí para acabar con el aislamiento en las cárceles. Nuestros hijos en prisión hicieron huelga de hambre por Rêber Apo. Estamos aquí para apoyarles. Nuestros hijos siguen luchando en la cárcel, y nosotros seguimos luchando fuera. La lucha continuará".