El copresidente de la delegación de las Asociaciones Democráticas Alevíes (DAD) en Ankara, Mustafa Karabudak, habló con la ANF sobre las políticas de asimilación de los alevíes y sobre los perturbadores actos que marcaron las casas de los alevíes en Izmir.

Expresando que los alevíes han sido objeto de masacres continuas desde Karbala, Karabudak dijo que "todos los genocidios hasta ahora son genocidios culturales. Cuando observamos las masacres de Sivas, Çorum, Malatya y Maraş, vemos que estas masacres también tienen otros objetivos.
No se trata sólo del asesinato de alevíes, sino del debilitamiento de la zona económica, del estrechamiento de los espacios de vida, de la inmigración, etc. Existen tales problemas. Muchos alevíes que no se sienten seguros eligen emigrar a las áreas metropolitanas y desaparecer allí".

"Los alevíes comenzaron a hacer lo que no hacían en los pueblos una vez que emigraron a las ciudades. Esto también tiene que ver con la asimilación", continuó  Karabudak, en respuesta a los problemas creados por el entorno inseguro causado por el ataque continuo a las casas, lugares de trabajo y propiedades de los alevíes.

Mustafa Karabudak también declaró que las clases obligatorias de religión tienen un efecto diferenciador. "La enseñanza religiosa obligatoria en las escuelas después del 12 de septiembre [del golpe militar de 1980] es también una política de asimilación. El punto de vista de los alevíes sobre la mujer y la sociedad y la postura de los oprimidos siempre ha perturbado el sistema. Al igual que el contacto de alevíes con el HDP en las elecciones de 2015. Contrarió al estado. La presencia de un grupo de oposición aleví que aún se resiste está perturbando el sistema".

El alevismo, que es una creencia antigua, no puede ser destruido por las políticas de asimilación, dijo el copresidente, e instó a Alevis a unirse contra los ataques y las provocaciones.