En Turquía, se están difundiendo rumores a través de las redes sociales de que Abdullah Öcalan ha muerto en prisión. "A la luz de esta situación, es imperativo obtener claridad sobre este tema", declaró la Oficina de Abogados de Asrin, exigiendo una comunicación inmediata con su cliente y sus compañeros de prisión en la isla de Imrali.

En un comunicado de hoy, Asrın Law Office, que ha estado representando legalmente al fundador del PKK desde su deportación de Kenia a Turquía en febrero de 1999 en violación del derecho internacional, indicó: "No podemos comunicarnos de ninguna manera con nuestros clientes Abdullah Öcalan, Ömer Hayri Konar, Hamili Yıldırım y Veysi Aktaş, que están encarcelados en Imrali. Mientras que la última conversación de abogados al Sr. fue una llamada telefónica el 27 de abril de 2020. La única llamada de Imrali hasta la fecha había sido autorizada en ese momento debido a la pandemia. 

El 14 de marzo de 2021, se hicieron acusaciones sobre la situación de Abdullah Öcalan en varias cuentas anónimas de redes sociales. No tenemos información sobre la situación de nuestros clientes desde el 27 de abril de 2020. Estamos examinando seriamente cualquier información sobre la situación en Imrali y tomando las medidas necesarias. No sabemos de dónde provienen o se difunden estas acusaciones, pero lo más importante para nosotros es que se hacen regularmente con respecto a Öcalan. Sin duda, el severo aislamiento en Imrali es la razón más importante de esta situación. Imrali no tiene acceso a ningún medio de obtener información. El hecho de que la prisión no es estándar que pueda ser visitada regularmente por familiares y abogados y de la que se pueda obtener información sobre la salud y las condiciones de vida de los presos, plantea preocupaciones serias y necesarias sobre las acusaciones realizadas. La forma de abordar estas preocupaciones es abrir los canales de comunicación con Imrali lo antes posible.

Insistimos en nuestra demanda de que se ponga fin al aislamiento que constituye el maltrato a los presos en Imrali y de la creación de canales de comunicación para abordar las preocupaciones sobre la salud y las condiciones de vida allí. Una vez más, hacemos un llamado a los legisladores y autoridades para que actúen de manera responsable abandonando esta práctica discriminatoria de aislamiento aplicada a una sola prisión y un solo grupo de detenidos, haciendo verificable la situación en la prisión de Imrali y permitiendo el derecho a las visitas legales y la comunicación sin distinción".