Las violaciones de derechos en prisión, como registros al desnudo, allanamientos sistemáticos, confiscación de cartas y amenazas, se denuncian en una declaración hecha por mujeres presas políticas en la prisión cerrada para mujeres de Bakırköy.

Amenazas abiertas

“Cada registro de rutina realizado recientemente en la prisión de Bakırköy se lleva a cabo en forma de redada. Se asigna un gran número de guardias que superan a la cantidad de prisioneras durante los registros como si fueran a una operación militar. Los guardias pisan las mesas de comedor, las desmantelan, incluso registran dentro de televisores y refrigeradores. Se realizan registros al desnudo para acosar a las mujeres. Estamos abiertamente amenazadas por la administración penitenciaria”, denuncia el comunicado.

Embargos y sanciones arbitrarias

“Se confiscaron los faxes y las cartas enviadas a HDP, CHP, ÖHD e İHD para denunciar estas violaciones y problemas. La administración penitenciaria impone un embargo para que estas violaciones no sean reportadas a los medios de comunicación e instituciones. Estamos sujetas a procedimientos penales por la menor objeción.

Otro tema importante es que el 1 de marzo de 2022, la presa Sibel Gölbaşı fue citada para reunirse con dos personas del servicio de inteligencia. Nuestra compañera, quien comprende de inmediato la situación, quería irse, sin embargo, la amenazan a ella y su familia.

"Engañar a jóvenes prisioneras"

Presentamos una denuncia penal por este incidente. Sin embargo, la administración también lo incautó y no se ocupó de él.

Sibel Gölbaşı es una joven compañera de 20 años. Esta es una política destinada a engañar a las jóvenes presas. Nuestra postura es clara. Hacemos un llamado a las instituciones pertinentes para que tomen medidas contra estas y otras situaciones y problemas similares”.