Se niega la medicación a un niño que permanece en la prisión de Diyarbakır con su madre
B.B., un niño que permane en la prisión de mujeres de Diyarbakır junto a su madre, no recibe su medicación; esto le provoca heridas en el cuerpo.
B.B., un niño que permane en la prisión de mujeres de Diyarbakır junto a su madre, no recibe su medicación; esto le provoca heridas en el cuerpo.
B.B., un niño que permanece en la prisión de mujeres de Diyarbakır junto a su madre, tiene heridas en varias partes del cuerpo por no poder tomar su medicación. Además, se le niega su derecho a jugar, algo que depende de los servicios psicosociales.
Según un informe de la asociación Derecho a la Vida publicado en octubre de 2021, un total de 345 niños menores de 6 años acompañan a sus madres en las cárceles turcas.
Según el informe, los niños están traumatizados por los cacheos. No están bien alimentados y no reciben suficiente atención médica. También tienen dificultades para tener tiempo para jugar.
El secretario general de la Fundación de Derechos Humanos de Turquía (TİHV), Coşkun Üsterci, dijo que los tribunales deben tener en cuenta las condiciones económicas y sociales de las madres con hijos menores de 6 años.
Según el Comité de los Derechos del Niño de la ONU, “en los casos en que los padres u otros cuidadores principales cometan un delito, se deben poner a disposición alternativas a la detención y aplicarlas caso por caso, teniendo plenamente en cuenta las posibles repercusiones de las diferentes sentencias en el interés superior del niño o los niños afectados”.
El número de niños que acompañan a sus madres en prisión en Turquía se disparó tras el intento de golpe de Estado de julio de 2016.