Activistas escoceses visitan a los huelguistas de hambre kurdos

Activistas escoceses escribieron una carta a los eurodiputados tras su visita a los huelguistas de hambre en Estrasburgo

Sarah Glynn, de Scottish Solidarity with Kurdistan, y Fiona Napier, del Aberdeen Trades Council, han vuelto a Escocia tras su visita a los kurdos en huelga de hambre indefinida en Estrasburgo.

Las activistas escocesas dijeron: "Estamos consternadas de que la indiferencia del mundo ante la situación kurda los haya llevado a tomar medidas tan desesperadas y arriesgar sus vidas, y hemos escrito la siguiente carta abierta a los eurodiputados escoceses, pidiéndoles hacer todo lo posible para que Turquía cumpla la simple reivindicación de los huelguistas de hambre de respetar las leyes básicas de derechos humanos y acabar con el aislamiento del líder kurdo, Abdullah Ocalan".

Los activistas enviaron su carta a los eurodiputados escoceses Alyn Smith, David Martin, Nosheena Mobarik, Ian Hudghton, Catherine Stihler.

El texto decía: "Escribimos para llamar su atención, como eurodiputados escoceses, sobre los huelguistas de hambre kurdos en Estasburgo, a quienes visitamos la semana pasada y cuya condición se está volviendo cada vez más peligrosa "Estos 11 hombres y 3 mujeres han estado en huelga de hambre indefinida desde el 17 de diciembre con una sola y simple revinidciación: que el gobierno turco cumpla con su propia constitución y convenciones internacionales sobre derechos humanos y ponga fin al aislamiento del líder kurdo encarcelado, Abdullah Öcalan".

Recordando que "la primera huelguista de hambre fue Leyla Guven, una parlamentaria kurda y presa política en Turquía, pero ahora hay más de 250 personas en huelga de hambre indefinida en las cárceles turcas y en todo el mundo", continuó la carta: "Una huelga de hambre es una acción de último recurso, solo tomada cuando el mundo se niega a escuchar. Öcalan es reconocido como su líder por millones de kurdos, y no tienes que ser kurdo para ser consciente del enorme impacto de sus ideas tras la democratización del norte de Siria, la construcción de puentes entre diferentes grupos étnicos y, especialmente, tras garantizar la total participación de las mujeres en la sociedad. En las últimas dos décadas, Öcalan ha intentado en repetidas ocasiones negociar un futuro pacífico y respetuoso para los kurdos en Turquía, y el respeto que él mismo lidera hace que su papel sea vital para cualquier acuerdo de paz entre los kurdos y el gobierno turco".

El grupo de huelguistas de hambre en Estrasburgo, dijo la carta, "pide expresamente a las instituciones europeas que presionen a Turquía, como miembro del Consejo de Europa".

Por eso, decían los activistas, "les pedimos, como diputados al Parlamento Europeo, que utilicen su influencia para lograr que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos tome medidas contra Turquía por sus abusos contra los derechos humanos, incluido el aislamiento de Öcalan, y que El Comité Europeo para la Prevención de la Tortura cumpla su deber fundamental y visite a Öcalan en prisión. También le pedimos hacer lo posible para ayudar a la UE a desarrollar una relación más crítica con Turquía y dejar de dar dinero europeo al gobierno turco".