El Tratado de Lausana fue firmado hace 98 años por las principales fuerzas coloniales de la época. Gran Bretaña y Francia cortaron porciones del mundo, creando fronteras y apoyando la formación de nuevos Estados. El Tratado, que puso fin al Imperio Otomano y creó la República de Turquía con fronteras diferentes a las del imperio, se firmó en 1923. Para 2023, Erdogan pretende cambiar las condiciones de este Tratado. El gobierno del AKP quiere recuperar los territorios que el Imperio Otomano perdió. Para ello, quieren ocupar toda la que llaman “zona de seguridad”, que va desde Afrin en Rojava hasta Kirkuk en Bashur, esperando que ello posibilite un cambio de condiciones para 2023. La invasión y la guerra actuales tienen por finalidad limpiar étnicamente la zona, asimilándola de este modo al Estado-nación turco.

El Tratado de Lausana ha dado forma a la lucha kurda, desde la rebelión de Dersim de 1936 hasta la resistencia contra las fuerzas turcas que actualmente atacan Idlib y preparan la invasión de Kobanê.

Hoy tendrá lugar una marcha en Lausana para protestar contra el Tratado que, hace 98 años, dividió el Kurdistán en cuatro partes y para promover la unidad nacional kurda.

En una declaración escrita, el Consejo de Co-presidencia de la Sociedad Democrática Kurda Suiza (CDK-S) ha dicho que la marcha se celebraría bajo el lema ‘Defendamos el Kurdistán contra la invasión turca’.

En el comunicado se hace un llamamiento a todos los kurdos y simpatizantes que viven en la diáspora, especialmente en Suiza, para que se unan a la marcha: “El insaciable y excesivamente ambicioso sistema capitalista sigue haciendo nuestro mundo inhabitable. Enfermedades, catástrofes, guerras y muertes, desastres y migraciones son los efectos de la degeneración creada por un sistema que no reconoce los límites morales, la vida y la naturaleza”.

Desde Ginebra llaman a participar en la macha de hoy

En Ginebra continúa la sentada de protesta iniciada por los kurdos frente a la Oficina de las Naciones Unidas (ONU) para levantar el aislamiento impuesto contra el líder político kurdo Abdullah Öcalan y conseguir su libertad.

Desde el 25 de enero, la sentada se lleva a cabo en torno a una tienda de campaña instalada frente a la Oficina de la ONU todos los miércoles.