Una amplia alianza de organizaciones de izquierda y estructuras kurdas de la región de Emilia Romagna tomó las calles de Bolonia (Italia) para mostrar su continua solidaridad con la lucha kurda.

Con la manifestación, los activistas de Italia se sumaron al llamamiento a la acción mundial para defender el Kurdistán el 11 de junio. Unas 500 personas participaron en la manifestación.

Los participantes en la manifestación condenaron la guerra del Estado turco fascista contra el Kurdistán, los ataques contra los ezidíes y las amenazas de Erdogan de una nueva invasión de Rojava. Los activistas criticaron el silencio del mundo y llamaron a romper este silencio y a defender el Kurdistán y la Revolución de Rojava en todo el mundo.

Los activistas tenían una enorme pancarta que decía "Defiende Rojava" y muchas banderas por la
libertad de Abdullah Öcalan.