Con el fin de demandar el cese del aislamiento impuesto al representante del pueblo kurdo, Abdullah Öcalan, se inició ayer en Antwerp una marcha de tres días.

Kurdos y simpatizantes se están uniendo a la marcha saludando con ella a los activistas en huelga de hambre indefinida, tanto en las prisiones como en varias partes del Kurdistán y de Europa, y más allá de toda frontera, y dando voz a sus demandas.

Después de que comenzara la marcha, en el Centro de la Sociedad Democrática Kurda, los activistas pusieron rumbo a la ciudad de Mechelen.

Se espera que la marcha concluya el domingo en la plaza Schuman, en Bruselas.