Un grupo de activistas ha llevado a cabo una acción en protesta por los ataques turcos contra los kurdos ocupando el mostrador de la aerolínea turca Turkish Airlines en el aeropuerto Malpensa de Milán.

Los activistas han declarado: “Desde el 20 de noviembre, Turquía lleva a cabo una vasta operación militar en Rojava dirigida contra pueblos y civiles para destruir infraestructuras como hospitales, centrales eléctricas y reservas de grano, aislando también a la población.

El uso por parte del Estado turco de armas químicas, armas prohibidas por las convenciones internacionales, está atestiguado, a pesar de que el dictador Erdogan ha hecho todo lo posible para impedir las operaciones de investigación de la OPAQ (Organización para la Prohibición de las Armas Químicas) creando falsas comisiones de investigación y encarcelando a los denunciantes nacionales”.

Los activistas han agregado: “Además, continúa la detención del dirigente Abdullah Öcalan en la isla-prisión de Imrali, donde está recluido desde 1999 en aislamiento máximo. Hace unas semanas, el Comité para la Prevención de la Tortura (CPT) del Consejo de Europa programó una visita con él para supervisar su estado, pero la reunión no tuvo lugar y se desconoce el motivo. Decidimos bloquear la facturación de Turkish Airlines: para desenmascarar al Estado turco, sus políticas y su naturaleza que, en la escena internacional, es elogiada incluso como pacificadora estratégica”.

El objetivo de estas acciones, han dicho los activistas, es “presionar a las instituciones y a la prensa para que revelen también la complicidad de Italia con esta guerra. Debemos exigir que el Estado italiano se comprometa a poner fin a los objetivos belicistas de Erdogan deteniendo inmediatamente el suministro de armamento al Estado turco”.

Noticias relacionadas: