Paz en el Kurdistán: el 15 de agosto de 1984 es una fecha histórica en la historia kurda moderna
El 15 de agosto de 1984 es una fecha histórica en la historia kurda moderna
El 15 de agosto de 1984 es una fecha histórica en la historia kurda moderna
La Campaña Paz en el Kurdistán emitió una declaración con motivo del 39 aniversario del 15 de agosto de 1984, definiéndolo como "una fecha trascendental en la historia del movimiento kurdo y de la resistencia popular a la opresión orquestada por el Estado dentro de Turquía. Esta fecha representa el inicio del resurgimiento de la lucha kurda y la fuerza actual del movimiento nacional kurdo tiene sus raíces en esta fecha de hace treinta y nueve años".
El comunicado decía: "El contexto histórico es crucial para comprender la decisión kurda de lanzar la resistencia organizada. Los kurdos se sintieron obligados a llegar a la conclusión de que no tenían otra opción. Apenas cuatro años antes, el 12 de septiembre de 1980, Turquía había sufrido un golpe militar que condujo a la suspensión de la Constitución democrática y a salvajes restricciones de todos los derechos civiles. Las fuerzas armadas turcas intensificaron sus brutales ataques contra la comunidad kurda en un esfuerzo por aplastar sus organizaciones.
Los kurdos ya creían que la política estatal turca de asimilación equivalía a la aniquilación. Significaba la eliminación de la identidad kurda expresada en la lengua, la cultura y el patrimonio. Incluso los aspectos aparentemente más inocuos de la identidad kurda, como el uso de nombres kurdos tradicionales para los recién nacidos, tocar música kurda y vestir trajes tradicionales, debían ser erradicados porque Turquía decretó que todo ello suponía una amenaza directa para la unidad turca y el dogma del Estado de "una nación, una bandera, un pueblo".
La resistencia activa de los kurdos en 1984 comenzó sólo seis años después de la fundación del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), que sigue inspirando y dirigiendo la lucha popular. El 15 de agosto de 1984 representó, por tanto, una nueva trayectoria para la resistencia kurda, que continúa hasta hoy, pero que adopta formas diferentes".
La declaración añadía: "Al conmemorar este aniversario en 2023, parece pertinente reflexionar por un momento sobre el impacto duradero y la influencia transformadora perdurable del PKK y el liderazgo de Abdullah Ocalan en el movimiento kurdo dentro de Turquía y mucho más allá de sus fronteras. La nueva dinámica creada por el PKK y Ocalan ha sido, y sigue siendo, absolutamente fundamental para la creciente confianza del pueblo y la fuerza de los kurdos como fuerza social en la historia contemporánea.
El PKK creó una nueva dinámica en la lucha política de los kurdos dentro de Turquía y más allá incluso del Kurdistán. Las ideas y la visión de Abdullah Ocalan, desarrolladas por sus seguidores en las organizaciones políticas kurdas, han transformado la suerte y la política del pueblo kurdo. Las ideas de Ocalan se han adoptado y desarrollado en muchas partes del mundo y en diversos movimientos sociales que buscan una alternativa al estancamiento de la política tradicional.
El partido aportó un gran dinamismo y actuó como catalizador vital para la organización de masas de los kurdos en un periodo crítico en el que se encontraban en horas bajas. Las campañas del movimiento kurdo por los derechos democráticos, sociales, políticos y culturales, por una nueva comprensión del significado de la autodeterminación y por la igualdad entre hombres y mujeres, entre otras cuestiones, deben su inspiración al PKK y al liderazgo de Abdullah Ocalan. El movimiento kurdo ha tendido la mano a grupos y fuerzas sociales ajenos a su propia comunidad para construir alianzas con otras comunidades y minorías no kurdas que se han enfrentado a la misma opresión por parte del Estado turco e igualmente de otros Estados existentes en la región kurda".
El comunicado decía: "El PKK ha animado a los kurdos a estudiar e investigar su propia historia y a inspirarse en su propio pasado, que les ha sido negado durante mucho tiempo por Turquía, que ha intentado imponer a los kurdos una identidad exclusivamente turca a través de un estrecho sistema educativo nacionalista en el que la enseñanza de la lengua, la historia y la cultura kurdas estuvo durante mucho tiempo totalmente prohibida. Con sus acciones, el PKK ha iniciado un renacimiento cultural kurdo moderno.
Generaciones de kurdos han conocido su propio patrimonio gracias a su participación en la lucha kurda. Sobre todo, y lo que es más importante, la existencia del PKK y su presencia como fuerza dentro de la sociedad kurda provocó un despertar de la conciencia social y política kurda que ya nunca podrá extinguirse. Esta nueva conciencia de la identidad kurda proporciona la confianza y la comprensión de que existe una solución política a los retos a los que se enfrenta el pueblo. Han aprendido la lección de que pueden lograr el cambio a través de sus propias acciones y de la solidaridad.
El PKK ha mantenido viva la esperanza de los kurdos que viven en sus tierras tradicionales y de los muchos millones de desplazados durante décadas. La comunidad kurda de la diáspora comparte con sus compatriotas el mismo sueño de vivir algún día en un Kurdistán libre. Para muchos, el modelo social ha sido ofrecido por Rojava y las comunidades autónomas que surgieron bajo la influencia directa de la visión política expuesta por Ocalan en sus diversos escritos y discursos. Es gracias al PKK y a su educación política entre el pueblo que los kurdos abrigan el sueño de un futuro posible transformado por sus esfuerzos combinados y de que un día incluso los desplazados durante décadas podrán volver a casa.
En el aniversario del 15 de agosto de 1984, Paz en Kurdistán se solidariza con el pueblo kurdo y reitera la lista de reivindicaciones cuyo cumplimiento sigue siendo el objetivo del movimiento kurdo y de nuestra campaña."
Paz en el Kurdistán exigió "la ilegalización del PKK; exigimos la libertad de todos los presos políticos, incluido el líder político reconocido de los kurdos, Abdullah Ocalan; pedimos la apertura de un proceso de diálogo que permita una paz justa y duradera entre Turquía y los kurdos.
Los kurdos se inspiran en su historia de lucha y quizá ninguna fecha sea más significativa en este sentido que el 15 de agosto de 1984. Aunque, por supuesto, la lucha del pueblo está lejos de haber terminado, los recursos que los kurdos han creado con su propio esfuerzo son formidables y los logros obtenidos durante estas décadas de lucha sólo pueden proporcionar las condiciones para renovar su lucha."