Susan Hassanzadeh, activista de derechos civiles y profesora de lengua kurda, lleva 23 días detenida sin visitas familiares ni asistencia letrada en el centro de detención del Ministerio de Inteligencia de Orumiyeh, provincia de Azerbaiyán Occidental.
A la Red de Derechos Humanos del Kurdistán (KHRN) una fuente le detalló: "Desde el arresto de la Sra. Hassanzadeh, solo ha tenido una breve llamada telefónica con su familia, informándoles que está recluida en régimen de aislamiento en un centro de detención de seguridad en Orumiyeh".
Su familia ha realizado varias visitas a la corte y a las autoridades de seguridad en Bukan, provincia de Azerbaiyán Occidental, en busca de información sobre su estado, pero no han recibido respuestas claras.
Hassanzadeh, residente de Bukan, fue golpeada y detenida por las fuerzas de seguridad en una calle de la ciudad el 15 de mayo.
Profesora de kurdo desde hace 17 años en Bukan y aldeas cercanas, ha sido citada e interrogada repetidamente por los servicios de seguridad en los últimos años por su activismo.
La presión sobre los y las activistas de la lengua kurda ha aumentado recientemente, con más citaciones, detenciones y penas de prisión.
A finales de abril, Soma Pourmohammadi, otra profesora de lengua kurda y miembro de la junta directiva de la Asociación Sociocultural de Nozhin, fue condenada a 10 años de exilio en la prisión de Kermanshah por la Sección Uno del Tribunal Revolucionario Islámico de Sanandaj, provincia de Kurdistán, por "formar grupos y asociaciones para perturbar la seguridad nacional".