Al menos 64 ‘riders’ perdieron la vida en accidentes de tráfico en Turquía en 2023

Al menos 64 repartidores en motocicleta perdieron la vida en accidentes de tráfico en Turquía en 2023, pero sus muertes no se registran como homicidios laborales.

En Turquía, especialmente durante la pandemia, el número de empleados de mensajería en motocicleta comenzó a aumentar. También aumentaron las violaciones de sus derechos laborales y las presiones.

Según los datos publicados por la Motorcycle Courier Rights Association, 30 moto-mensajeros perdieron la vida en accidentes en 2021, 58 en 2022 y al menos 64 en 2023. Los conocidos como riders, que inicialmente eran vistos como trabajadores, ya no son vistos como tales en los registros oficiales debido al deseo de sus patrones de evitar la responsabilidad por las numerosas violaciones de derechos a las que los someten.

Con el modelo Tradesman Courier introducido antes de la pandemia, los repartidores en motocicleta se vieron obligados a crear una empresa unipersonal. Estas empresas son vistas como subcontratas de empresas más grandes como Trendyol, Hepsi Burada y Getir, y a los repartidores se les paga en función del número de paquetes que entregan. Sus muertes no se registran como homicidios ocupacionales. El hecho de que consten como accidentes de tráfico libera a las empresas para las que trabajan de toda obligación legal.

Mehmet Timurtaş, uno de estos repartidores y uno de los candidatos a diputado del Partido de la Izquierda Verde en Estambul en las elecciones generales del 14 de mayo, habló con ANF sobre los problemas que enfrentan los mensajeros en motocicleta.

Los patrones no tienen ninguna responsabilidad si tenemos un accidente o morimos.

Timurtaş denunció que con la nueva ley ahora han perdido el estatus de trabajadores y no están exentos del IVA, además de que tienen que pagar sus primas del seguro de la moto con el dinero que ganan. Timurtaş continuó: "Debido al nuevo estatus, viajamos más rápido porque las áreas de entrega son más amplias. Oficialmente nos estamos poniendo en peligro a nosotros mismos, y también ponemos en peligro las vidas de las demás personas".

Timurtaş afirmó que se ven obligados a aceptar más paquetes a la vez debido a la avaricia de ganancias de los patrones en este período, a diferencia del período en el que trabajaban con seguros, y dijo que esta sobrecarga provoca un aumento de los accidentes. Timurtaş dijo: "No somos trabajadores sobre el papel. En el nuevo modelo, tenemos que establecer una empresa privada y como trabajamos por cuenta propia, los patrones no tienen ninguna responsabilidad si tenemos un accidente o morimos. Hay más de 300 mil repartidores en moto trabajando en Estambul."

Timurtaş dijo que un amigo suyo había perdido la vida recientemente en un accidente de tráfico y que la persona que causó el accidente fue liberada después de que se le tomara declaración porque trabajaba en un consulado. Timurtaş continuó: "Dado que en el papel no somos considerados trabajadores, esta muerte se registró como un accidente de tráfico.

Nos dan mucho más que la carga que puede llevar una moto porque, de lo contrario, tendrían que emplear más mensajeros y no quieren hacerlo.

Por ejemplo, nos piden que llevemos 8 paquetes de agua de una vez cuando como mucho deberíamos llevar uno. El patrón hace esto porque tendría que pagar cada viaje por separado. Los accidentes ocurren por esto."

Timurtaş hace referencia al accidente en el que el hijo del presidente somalí supuestamente mató a un repartidor que iba en moto en un accidente de tráfico en el distrito Fatih en Estambul. El hombre huyó del país tras el incidente.

64 repartidores en motocicleta perdieron la vida en Turquía en 2023

Timurtaş dijo que 64 moto-mensajeros perdieron la vida solo en 2023 en Turquía y agregó que no solo los jefes sino también las personas que realizan pedidos deben tener cuidado con algunas cuestiones, y deben tener en cuenta los retrasos al realizar pedidos en condiciones climáticas adversas. Timurtaş explicó que existe un sistema de puntuación para los repartidores, y que incluso un retraso de cinco minutos aumenta la presión sobre el repartidor por temor a recibir una puntuación baja.

Timurtaş añadió: “Hay personas que nos regañan y nos insultan cuando llegamos tarde en condiciones climáticas desfavorables o tormentosas. No creen que no sea posible trabajar con tan mal tiempo. Nos ponemos en riesgo, pero nos insultan por llegar cinco minutos tarde. Les pedimos que sean un poco más comprensivos. Cuando hace mal tiempo, el número de pedidos aumenta y es más peligroso para nosotros. Hay un sistema de puntuación en el que dan malas puntuaciones y esto les da a los jefes la oportunidad de despedirnos. Con el nuevo modelo, cuanto más trabajas, más dinero obtienes. Los patrones también usan esto y presionan a los repartidores para obtener más ganancias, obligándoles a realizar maniobras arriesgadas que causan accidentes y muertes".

Noticias relacionadas: