Ayata: "Nuestra resistencia es una necesidad histórica" – I parte

“Nuestra resistencia no es el resultado de una decisión arbitraria, sino una necesidad histórica”, dijo Muzaffer Ayata del Comité Central del PKK.

Muzaffer Ayata es miembro del Comité Central del Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK). Es cofundador del movimiento por la libertad y fue arrestado en 1980, unos meses antes del golpe militar, y severamente torturado en la prisión militar de Amed (tr. Diyarbakir). Fue condenado a muerte por "separatismo" y la pena de muerte fue conmutada por una pena de prisión de cuarenta años en 1991. En 2000, fue puesto en libertad con una prohibición de por vida de toda actividad política. Fue encarcelado nuevamente en el exilio alemán. Tras su liberación, se reincorporó inmediatamente a la lucha por la libertad como líder del PKK. En una entrevista con ANF, Ayata traza conexiones históricas.

Recién se cumplían 42 años del golpe militar del 12 de septiembre de 1980. ¿Qué consecuencias tienen todavía hoy estos hechos?

El golpe del 12 de septiembre causó una gran destrucción en Turquía. Si miras hacia atrás, puedes decir que es el origen del fascismo actual y de las políticas genocidas de Erdoğan. Erdogan y sus políticas se alimentan del 12 de septiembre. Hoy, Turquía sigue gobernada con una constitución racista-monista que niega a los kurdos y legitima el genocidio contra ellos. Esta concepción del estado, que tiene sus raíces en el Comité para la Unidad y el Progreso, se convirtió en ley en Turquía con la constitución de 1924. Casi todas las constituciones en Turquía fueron redactadas por militares. Los militares no permitieron que la dinámica interna de la sociedad se desarrollara, luchara y organizara. Se derramó mucha sangre por el golpe de Estado del 12 de septiembre. El MHP (Partido del Movimiento Nacionalista) y los campamentos de comando se crearon con la ayuda del estado, así como las masacres fueron implementadas por el Estado. Sin el apoyo, la aprobación y la ayuda del estado, tales movimientos no pueden surgir y desarrollarse en Turquía. Ningún movimiento racista o fundamentalista ha surgido jamás en Turquía sin la voluntad y el consentimiento del Estado. 

El 12 de septiembre fue también el comienzo del proceso en el que la síntesis turco-islámica se convirtió en política de Estado oficial. Erdoğan es producto de esta política. Estableció el régimen monista y fascista que los generales no se habían atrevido a implantar en su momento. Hoy, el líder fascista Erdoğan está tratando de completar lo que los generales dejaron inconcluso. Erdoğan dice: "Estábamos en contra de la dominación de los militares, la abolimos", pero esto es mentira. Por el contrario, extendió la tutela a todos los sectores civiles e instituciones religiosas. El estado no podía establecer tal regla antes. El 12 de septiembre es un día de enemistad contra los kurdos y contra todos los valores de la humanidad. El actual gobierno del AKP/MHP está siguiendo la misma estrategia que los golpistas de entonces. Con su "plan de derrota", el fascismo del AKP/MHP ha proclamado la eliminación de los kurdos y su movimiento de libertad. Decía: "En 2023, no habrá más kurdos, los reprimiremos y destruiremos". Esto es exactamente lo que sucedió el 12 de septiembre.

Cuando hablamos del 12 de septiembre, también hay que pensar en lo que pasó en las cárceles y en las profundas heridas que allí se infligieron. ¿Cómo se eligió entonces el foco de los ataques?

Las prisiones se convirtieron en escenario de grandes luchas. Partiendo de la mentalidad y acciones reaccionarias orientadas hacia el militarismo y el estado nación, y apoyadas por los EE. UU. y la OTAN, el fascismo se volvió hacia las cárceles en cierto momento. Miles de militantes y cuadros fueron encarcelados. Prisiones como Mamak, Metris y Amed eran las cárceles centrales. Había prisiones del Comando de la Ley Marcial en Adana, Erzurum y Elazığ. Los lugares donde más se desarrolló la lucha y donde más personas fueron encarceladas fueron Mamak, Metris y Amed.

¿Qué tenía de especial Amed?

La singularidad de Amed resultó de la lucha del PKK y del hecho de que Amed es la capital histórica de los kurdos. Por esta razón, Amed fue elegido como objetivo especial. También hubo represión en otras prisiones, pero Amed fue blanco específico de un plan racista y destructivo para destruir la identidad kurda y sus organizaciones. Este plan, por supuesto, encontró resistencia por parte de los cuadros del PKK y otras fuerzas. En Amed, el PKK se vería obligado a traicionar y confesar. Se pensaba que si el PKK era quebrantado, derrotado y liquidado, los demás no podrían resistir. En otras palabras, comenzaron con el PKK porque era el más fuerte y resistente, y tenía la base más amplia entre la población kurda. El PKK resistió sobre la base de Rêber Apo.

¿Podría dar un ejemplo de esto?

Los ejemplos más destacados fueron compañeros como Kemal, Hayri y Mazlum. Antes de su arresto, estos compañeros jugaron un papel importante en la fundación y desarrollo del PKK y su expansión en Kurdistán. Fueron muy amados y respetados en toda la estructura del PKK y crearon este amor y respeto a través de su trabajo, conciencia, sacrificio y humildad. No había poder financiero ni se trataba de su propia carrera. Ellos crearon todo a partir de sí mismos. El 14 de julio de 1982 entraron en su gran ayuno contra el fascismo y cayeron en septiembre. Mazlum encendió la chispa de la resistencia en Newroz. Como un Kawa moderno, iluminó Kurdistán y se convirtió en la vanguardia de la resistencia. Por supuesto, acciones como las huelgas de hambre requieren una gran fuerza de voluntad. Tales cosas requieren un pensamiento claro, decisión, resiliencia y perseverancia.

El ayuno de la muerte que comenzó el 14 de julio se llevó a cabo en condiciones difíciles. Los huelguistas de hambre soportaron el dolor y la agonía de sus cuerpos derritiéndose gramo a gramo. No fue fácil para estas personas que "amaban tanto la vida que estaban dispuestos a morir por ella" aceptar la muerte. El compromiso de Kemal y de los demás que habían comenzado a ayunar el 14 de julio, su apego a la vida, se puede resumir en estas palabras. En otras palabras, sabían lo que estaban haciendo. Conocían la historia y eran conscientes de la situación social. Eran conscientes de lo que tramaba el fascismo. Por eso arriesgaron su existencia y su vida para frenar el proyecto de exterminio del fascismo. Sus acciones tuvieron profundas consecuencias históricas.

¿Cuáles fueron las consecuencias de esta resistencia?

Demostraron el nivel de militancia, entrega y sacrificio del PKK. Implementaron su resistencia en el lugar más imposible. Lucharon en el lugar más asediado, más aislado, donde las posibilidades eran más limitadas. De esta manera, crearon un punto de referencia para la militancia del PKK. De ahí viene la valiente lucha que hoy se desarrolla. No es algo que surgió espontáneamente. La militancia, el nivel de pensamiento y la determinación de Hayri, Kemal y Mazlum son el alimento, la base y el motor de la valentía de hoy. Nadie puede distorsionar esta realidad.

Kemal Pir cayó el 7 de septiembre. Fue el primero de los camaradas en caer. Luego, Hayri cayó el 12 de septiembre, Akif Yılmaz el 15 de septiembre y Ali Çiçek el 17 de septiembre. Estos aniversarios conectan 1982 y 2022. Han pasado 40 años desde entonces, pero siguen vivos en nuestra lucha, nuestra historia, nuestra guerra y nuestra resistencia.

¿Han cambiado los objetivos del PKK?

Así como Turquía no ha renunciado a sus objetivos, el PKK no ha renunciado a su resistencia. Nunca se rendirá. Los enfrentamientos y luchas históricas continúan. Mientras no termine el proyecto de aniquilación y negación del pueblo kurdo, la guerra y la resistencia continuarán. El hecho de que estemos resistiendo tan masivamente y jugándonos la vida no es el resultado de una decisión arbitraria. Esto debería ser de conocimiento común. Es una necesidad histórica. Participamos en esta lucha voluntariamente. No vivimos cómodamente, nuestra resistencia nace de la necesidad. Porque sabemos; hay guerra, muerte, mazmorras, tortura. Nuestro pensamiento, nuestros ideales y nuestra conciencia exigen que nos opongamos a la tiranía y la injusticia. El gran ayuno del 14 de julio mostró el papel que juega esta lucha por el libre albedrío en la historia, que puede frustrar el fascismo, que traiga confianza y esperanza a la gente. El fascismo fue derrotado en prisión. El estado turco, la junta del 12 de septiembre, tuvo que poner fin a la tortura, al intento de romper el movimiento en la cárcel de Amed. Entonces, aceptó su derrota. Los Kemals, Hayris y Mazlums están invictos, todavía hoy siguen vivos y han pasado a la sociedad.

Muchos guerrilleros hoy en día llevan los nombres de Hayri, Kemal y Mazlum. Continuaremos pagando nuestra deuda con ellos con gratitud.

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