La participación de EEUU en el ataque de ISIS a Sinjar en 2014

Cuando ISIS atacó Sinjar el 3 de agosto de 2014, el ataque formaba parte de un plan de genocidio liderado por los EE.UU.-Turquía. Ahora que ISIS no tiene la capacidad, el papel ejecutor corresponde a Turquía.

De acuerdo con este plan,  ISIS atacaría el Cantón de Cizre en Rojava después de tomar Sinjar. Sinjar era un lugar estratégico para que ISIS atacara Rojava.

Si Sinjar hubiera sido tomado por ISIS, se hacía posible conquistar el resto de Rojava comenzando por Cizre y liquidando así la revolución de Rojava. Los rumores apuntan a que este sucio plan fue ideado por EE.UU., Turquía y el KDP, y que ISIS lo ejecutaría.

Según los cálculos de los EE.UU., el éxito de este plan de forma controlada pretendía también asegurar el establecimiento de un equilibrio chiíta-sunita en Irak. Para los EEUU la actual preponderancia del componente chiíta en Irak se había vuelto muy fuerte y este hecho perturbaba a los EE.UU. En cierto modo, esa preponderancia chiíta en Irak significaba que la influencia de Irán era más alta y esto era difícil de digerir para los EE.UU.

Por otro lado, la Revolución de Rojava, que se desarrolló como una alternativa a la modernidad capitalista, también fue una causa de malestar. Turquía ya no tenía límites. Turquía quería llevar a cabo, a través de ISIS, el genocidio del pueblo yazidi en Sinjar y desde allí liquidar la Revolución. Si lograba este objetivo, dominaría el noreste de Siria, y la línea de Sinjar, Mosul, Kirkuk y Telefer en Irak. El centenario sueño otomano se haría realidad gracias a ISIS. La "crisis de los rehenes", que duró meses en Mosul, fue sólo un juego para encubrir la cooperación del AKP con ISIS.

Con este plan, el petróleo del Cantón de Cizre, Derik y Rimelan sería la recompensa para el KDP a cambio de vender Sinjar al ISIS. De acuerdo con el plan, si los ataques de ISIS a Sinjar y Rojava tuvieran éxito, esta región de Rojava sería entregada al KDP. Lo que explicaría por qué el KDP entregó Sinjar al ISIS sin ofrecer ninguna resistencia.

Sin embargo, la participación de las guerrillas del PKK y su intervención en Sinjar desbarató todo el plan. 12 valientes guerrilleros, con el apoyo de las YPG-YPJ, repelieron el ataque de ISIS en Sinjar. Salvaron a los Yazidis del genocidio e impidieron que ISIS atacara Cizre.

Otro desarrollo muy interesante tuvo lugar en este proceso. Durante el mismo período, ISIS se dirigió hacia Makhmûr, Kirkuk y Erbil. Sin embargo, este hecho sembró el desorden en el plan. Aparentemente, una de las fuerzas participantes en el plan dirigieron conscientemente a ISIS hacia el sur del Kurdistán. En ese momento, no se discutió mucho sobre qué fuerza envió a ISIS a Erbil.

Este complot, que fue estropeado por la intervención de la guerrilla del PKK en 2014, ahora se ha retomado de nuevo, con algunas actualizaciones y cambios. Un funcionario de EE.UU. dice que "Irak-Turquía y el KDP pueden desarrollar una solución civil en Sinjar" y un nuevo ataque comienza. Este plan de ataque forma parte de las invasiones turcas de Afrin, Serekaniye y Girê Spî. EE.UU., Siria e Irak quieren un plan que se adapte a Turquía.

Las declaraciones anti-kurdas de la administración de EE.UU., los mensajes dados para la purga del PKK y los esfuerzos para atraer a Irak a este plan son notables. Los Estados Unidos hacen un gran esfuerzo para acercar a Turquía a Irak, y para moldear a Siria e Irak según Turquía.

El esfuerzo de EE.UU. para dar forma a la región de una manera que se adapte a Turquía es ahora claro como el agua. Desde Idlib a Serêkaniyê, desde Serêkaniyê a Heftanîn y Xakurkê está claro que los Estados Unidos han dado la aprobación a la ocupación turca y, de hecho, un nuevo papel a Turquía. Los Estados Unidos están utilizando a Turquía pero también están tratando de neutralizar la dinámica democrática revolucionaria en la región. Como tal, los EE.UU. se han convertido en un socio y partidario del Estado turco en sus políticas de genocidio kurdo.

El apoyo proporcionado por los EE.UU. al Estado turco, que ha estado cometiendo un genocidio contra los kurdos y las diferentes identidades étnico-religiosas durante un siglo, revela más que nunca la cara sucia e inhumana del capitalismo. Con esta actitud, los EE.UU. se han ganado la hostilidad de los kurdos y la gente de la región. Los kurdos lucharon heroicamente contra ISIS, el enemigo de la humanidad, pusieron fin a la dominación de ISIS y ahora esta espuria política contra el pueblo más oprimido y justo del mundo condena a los EE.UU., que aparecen como los culpables en la conciencia del pueblo kurdo y de la humanidad.

En 2014 este plan contaba con la ayuda de ISIS, ahora su ejecutor directo es Turquía.

Turquía busca una nueva dominación en Kirkuk para gobernar Sinjar, Mosul, Tall Afar. Este plan tiene como objetivo eliminar todas las conquistas de los kurdos, incluidas las realizadas en el Kurdistán del Sur, liquidando al PKK, y llevar a cabo las políticas de genocidio contra los kurdos.

Los kurdos y los pueblos de la región no deben guardar silencio ante las sucias conspiraciones de estas fuerzas reaccionarias que son hostiles a la lucha del pueblo por la libertad y la democracia.

La lucha democrática unida de los pueblos se ha convertido en algo muy esencial. La alianza estratégica y la lucha común de los pueblos de la región tiene el poder de derrotar todo tipo de conspiraciones.