El estado turco ha desplazado a unos 300,000 civiles en sus ataques contra el norte de Siria. Ahora viven en condiciones difíciles en campamentos de refugiados o escuelas. En los campamentos, el acceso a la atención médica es muy difícil porque no hay suficientes recursos disponibles. Esto conlleva grandes dificultades, especialmente en los meses de invierno. Dado que las organizaciones de ayuda internacional no proporcionan fondos, la Media Luna Roja Kurda (Heyva Sor a Kurd) trata de pagar la atención médica con sus propios recursos.
Abdulselam Mihemed, de 50 años, de Serêkaniyê (Ras al-Ain) sufre de esclerosis múltiple y, como persona internamente desplazada, ahora casi no tiene acceso al tratamiento para su enfermedad. Vive con su familia en el campamento de Washokani, un campamento de recepción a unos doce kilómetros de Hesekê. Mihemed expresó: "Soy padre de diez niños. Mis hijos sufren mucho de resfriado. Tengo esta enfermedad desde que tenía siete años. Ahora puedo moverme cada vez menos".
Nadie, excepto Heyva Sor a Kurd está ayudando, continúa Mihemed. Por esto pide el apoyo de organizaciones de ayuda internacional, especialmente una silla de ruedas con motor eléctrico.
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