La diputada del HDP Muş Gülistan Kılıç Koçyiğit habló con ANF sobre el aislamiento agravado impuesto al líder del pueblo kurdo Abdullah Öcalan que se encuentra en la prisión de la isla de Imrali desde su salida forzada a Turquía como resultado de una conspiración internacional el 15 de febrero de 1999.

Señalando que el aislamiento se lleva a cabo de conformidad con un acuerdo internacional, Koçyiğit declaró que todas las prácticas en Imrali forman parte de un escenario internacional.

Koçyiğit afirmó que la indiferencia y el silencio de estructuras como el CPT y el Consejo de Europa deben considerarse dentro de este marco: "Sabemos que la UE, las Naciones Unidas y el Parlamento Europeo están perdiendo su influencia, pero podemos afirmar que las prácticas contra Öcalan forman parte de un concepto mundial, intencionado y voluntario. El CPT publicó su informe sobre su visita de 2019 en 2020, afirmando que la prohibición de las visitas de familiares y abogados no puede tolerarse de ninguna manera y que Turquía debe tomar las medidas adecuadas al respecto. Turquía no ha tomado ninguna medida y no ha habido respuesta. Todo esto es el resultado de la actitud del sistema internacional hacia Abdullah Öcalan. Están completamente comprometidos a mantener a Abdullah Öcalan aislado en la isla de Imrali".

'Turquía comete un crimen'

Recordando el "derecho a la esperanza", que es una costumbre general del derecho penal internacional, aceptada por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH), Koçyiğit continuó "No es concebible pasar toda la vida confinado. Incluso si se le condena a cadena perpetua con agravantes, debe tener derecho a ser liberado tras un periodo de tiempo determinado. Cuando consideramos a Abdullah Öcalan, nos damos cuenta de que el tema es mucho más delicado y complejo. No estamos hablando de ningún preso en particular. Estamos hablando de una persona a la que los kurdos se refieren como su "líder", y cuya voluntad está representada a través de su firma. Además, se trata de una persona que se encuentra en una coyuntura crítica para la resolución democrática de la crisis kurda, que trabaja con empeño por una solución verdaderamente pacífica, que reflexiona, que refleja su concentración intelectual en escritos y libros, y que lo comunica en sus reuniones. En este sentido, mantener a Abdullah Öcalan en aislamiento es un crimen de tortura. Turquía comete un crimen al violar tanto sus propias leyes como las internacionales".

'Hay que hablar de libertad física'

Koçyiğit declaró que debe debatirse la libertad física del líder popular kurdo Abdullah Öcalan y las condiciones en las que puede contribuir a la solución democrática de la cuestión kurda, y añadió que la situación actual no debe durar eternamente y debe ser tratada.

Subrayando la importancia de Abdullah Öcalan para una solución, Koçyiğit declaró que su libertad o las condiciones que contribuyan al proceso de solución pacífica democrática deben proporcionarse lo antes posible.

Observando que el aislamiento impuesto a Abdullah Öcalan se ha extendido por todo el país, Koçyiğit declaró: "Es difícil que cualquier individuo, comunidad o partido político de este país que desee la democracia, la igualdad y la libertad permanezca en silencio y niegue el aislamiento de Imrali.

El único requisito previo para el Estado de Derecho en Turquía es el levantamiento del aislamiento en Imrali y la concesión de plenos derechos a Abdullah Öcalan."