Se está llevando a cabo en Qamishlo el segundo foro sobre violaciones de derechos humanos cometidas en el Afrin ocupado.

Allí, los participantes han destacado los brutales crímenes del Estado turco contra mujeres y niños en Afrin, y han criticado al gobierno de Damasco por permanecer en silencio.

Mecdolîn Hesen, abogada en el campo de la ley internacional e integrante del Consejo Asesor de la Mujer, dio un seminario en el que señaló que los mercenarios cometieron brutales crímenes en Afrin, ocupado por el Estado turco desde marzo de 2018. Además, puso de relieve que cientos de personas han sido secuestradas por los mercenarios y que todos estos crímenes están registrados. Hesen dijo que hacer rendir cuentas a los criminales de Afrin se ha convertido en una cuestión internacional.

Señalando que todas las organizaciones de derechos humanos en Siria deben proteger Afrin, Hesen dijo: “Los que viven en Afrin son ciudadanos sirios. Todas las organizaciones legales en el mundo deberían hacer que los responsables de estos crímenes rindieran cuentas. El Estado turco es el principal responsable de los crímenes cometidos en Afrin. Sin embargo, el gobierno de Damasco no cumple con su responsabilidad y permanece en silencio ante los crímenes cometidos. La administración de Damasco tiene miedo del modelo de administración autónoma y democrática creado por el pueblo de Afrin”.

Llamando la atención sobre los crímenes cometidos contra las mujeres, Hesen señaló que las instituciones de mujeres deberían enviar los documentos relativos a estos crímenes a los tribunales internacionales.

Otros participantes en el foro también hablaron sobre los crímenes contra las mujeres en Afrin. El abogado Ehmed Receb Şehate Mehmud, profesor de la Facultad de Derecho de Alejandría y miembro de la Asociación de Abogados Egipcio-Árabes, llamó la atención sobre los crímenes cometidos por el Estado turco contra ellas. Afirmando que el Consejo de Seguridad de la ONU debería tomar medidas contra los crímenes cometidos, Mehmud señaló que debería crearse un tribunal internacional como el establecido para Yugoslavia para los crímenes cometidos en Afrin.

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