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El sindicato de mujeres Zenobiya planea ampliar su labor a toda Siria

El sindicato de mujeres Zenobiya trabaja para la organización de las mujeres en las regiones del norte y el este de Siria, Raqqa, Tabqa, Manbij y Deir ez-Zor. Sin embargo, el trabajo se extenderá a toda Siria.

La Revolución de Rojava es conocida como una revolución para la liberación de las mujeres. La revolución, iniciada principalmente por mujeres kurdas, tuvo profundos efectos en la vida de mujeres de las más diversas identidades étnicas de la región. El sindicato de mujeres Zenobiya ha estado trabajando en las regiones predominantemente árabes de Raqqa, Deir ez-Zor, Tabqa y también en Manbij. Houda Isa Ali es la portavoz de la asociación. En esta entrevista de ANF, habló sobre el trabajo de la organización y los planes para el año que viene.

¿Cuál era la situación de las mujeres en la sociedad y cómo estaban organizadas en Siria antes de la revolución?

No tenían una misión y no importaban. En estas regiones vivían sobre todo árabes y kurdas. En aquella época, había algunas instituciones de mujeres en Raqqa. También se llamaban Unión de Mujeres, pero sólo representaban a las mujeres por su nombre. Trabajaban bajo la influencia del gobierno de Damasco. Sólo podían ser admitidas las mujeres del Partido Baas. El grupo estaba formado por unas pocas personas y mujeres conocidas. Sí, las mujeres iban a la escuela y se graduaban en la universidad, pero como el papel que se asignaba a las mujeres en la sociedad era tan subordinado e influyente, estas mujeres educadas no podían desempeñar un papel importante. Sólo las mujeres que servían a los intereses del régimen del Baas y defendían las opiniones del régimen podían salir a la palestra. En cualquier caso, la gente del régimen del Baas venía de fuera y administraba la empresa. Por lo tanto, las personas que habían estudiado también se sentaban en casa. Este sistema duró 40 años.

¿Qué influencia tenían las mujeres al principio de la revolución?

Cuando comenzó la revolución, las mujeres querían ocupar su lugar, pero la revolución se alejó de su propia línea y las mujeres fueron expulsadas de nuevo. Las mujeres tenían grandes esperanzas en la revolución siria. Esperaban obtener sus derechos, su libertad y poder participar en muchos ámbitos. Todas estas esperanzas se desvanecieron cuando la revolución se desvió de su camino. Los saqueos y robos duraron dos o tres años cuando algunos grupos armados ocuparon nuestra región. Luego comenzó la ocupación del ISIS. Eso fue un golpe aún más duro para las mujeres. Han sido masacradas, vendidas en los mercados, encerradas en las casas, obligadas a llevar velos negros, violadas y esclavizadas por los mercenarios del ISIS. Raqqa se convirtió en la capital del ISIS. Aquí se produjo un gran sufrimiento. Las mujeres yazidíes fueron traídas aquí y vendidas. Las mujeres de Tabqa, Manbij y Raqqa corrieron la misma suerte. La gente de aquí sufrió mucho bajo el dominio del ISIS. Habíamos perdido la esperanza de sobrevivir a esto, pero la resistencia de Kobanê reavivó nuestra esperanza.

¿Qué impacto tuvo en las mujeres de la región, especialmente cuando los combatientes del YPJ lucharon contra el ISIS y triunfaron?

Cuando Kobanê y Girê Spî fueron liberadas y el YPG y el YPJ se organizaron y desarrollaron, muchas de nuestras jóvenes se unieron al YPJ para salvarse de esta opresión. Muchas de estas jóvenes cayeron mientras liberaban sus regiones de origen. A medida que el YPG y el YPJ liberaban más zonas, nuestra esperanza de libertad crecía. Hemos visto cambios históricos cada día. Tras la victoria en Kobanê, las mujeres de Raqqa, Tabqa y Deir ez-Zor comenzaron a ocupar su lugar en las unidades militares. Lucharon por la liberación de su propia patria. Tras la liberación de estas zonas, creímos que era necesario que las mujeres de Raqqa, Tabqa, Manbij y Deir ez-Zor se organizaran y vivieran con este espíritu. Si las mujeres estaban ahora activas en las instituciones de liderazgo, en las fuerzas de defensa y seguridad, en la educación, en los partidos políticos y en los ámbitos ideológicos, esto representaba un gran éxito para todos. Ahora los colores de las mujeres han empezado a hacerse visibles en la sociedad. Las mujeres participan ahora en todos los ámbitos.

¿Cómo surgió la idea del sindicato femenino Zenobiya? ¿Por qué Zenobiya? ¿Significa algo especial?

Por supuesto, las instituciones femeninas que se fundaron en nuestras zonas no cayeron del cielo. Tomamos ejemplo de las mujeres de Cizîrê. Las aceptamos como pioneras. Después de fundar Kongra Star, seguimos este ejemplo y fundamos nuestras propias instituciones femeninas en nuestras regiones. Estas instituciones de mujeres establecidas en nuestras regiones se han convertido en centros de mujeres y lugares donde se resuelven los problemas de las mujeres. Cada una de las instituciones establecidas anteriormente trabajaba por separado. Trabajaban en forma de diversas instituciones de mujeres, instituciones autónomas, comités Kongra Star y refugios para mujeres. Así es como se ha desarrollado nuestro trabajo en los últimos cuatro años. Cuatro años después, decidimos que estas instituciones debían fusionarse bajo el paraguas de un sindicato de mujeres. Así, se decidió fundar la Unión de Mujeres de Zenobiya. En el congreso de junio se decidió fundar un sindicato de mujeres. Su objetivo es organizar a las mujeres en la política, la defensa, la empresa, la educación, la asistencia sanitaria y todos los demás ámbitos.

Zenobiya (Zenobia 240-274 d.C.) fue la reina de Palmira (Tadmur). Fue una mujer que luchó por las mujeres y no se sometió a la persecución. Por eso nosotras, como mujeres de Siria, hemos elegido este nombre.

Por el momento, Zenobiya está trabajando para organizar a las mujeres de Raqqa, Tabqa, Manbij y Deir ez-Zor. En el futuro ampliaremos nuestro trabajo a todas las zonas de Siria. Tras la creación del sindicato, se crearon cuatro oficinas en Raqqa, Tabqa, Manbij y Deir ez-Zor. Estas cuatro oficinas están gestionadas por un consejo de administración. El consejo está formado por siete personas. En las cuatro oficinas se formaron once comités. Los comités de economía, educación, prensa, ideología, defensa, familias de los mártires y paz trabajan activamente. También pretendemos crear un comité de cultura en un futuro próximo. Cada color del logotipo de Zenobiya representa a un pueblo diferente. Las letras están en árabe, kurdo y arameo.

¿Cómo recibieron las mujeres de la región esta iniciativa?

Tras la fundación de la Unión, se celebraron reuniones con mujeres de todos los ámbitos. Hubo amplios debates con todas las mujeres. Las mujeres apoyaron mucho este proyecto. En el próximo mes se creará un consejo general de mujeres. Todas las instituciones de mujeres estarán representadas en este consejo: la Administración Autónoma, Kongra Star, Mala Jin, la Unión de Mujeres de Zenobiya y el Consejo Democrático Sirio,

Las mujeres de nuestra región se han desarrollado muy bien políticamente. Zenobiya se ha convertido en un centro donde todas las mujeres pueden expresarse. Todas las mujeres quieren defender sus derechos a través de esta institución. Pero también hay restos de la mentalidad del ISIS en la sociedad, y eso nos lo pone difícil.

Algunas costumbres y tradiciones procedentes de una cultura tribal nos plantean un reto. Queremos provocar un cambio en la sociedad a través de la educación. Continuaremos con nuestra resistencia.