El Movimiento de Mujeres Kurdas en Europa (TJK-E) publicó una declaración en memoria de Gülistan Aksoy (Nombre de Guerra: Hêvî Gabar). La revolucionaria kurda murió de una enfermedad en Berlín el 26 de julio.
La declaración de TJKE-E la recordó de la siguiente manera:
"Hêvî Gabar dedicó su vida a la lucha de liberación del pueblo y las mujeres kurdas. Estamos profundamente tristes por su pérdida. Heval Hêvî estuvo un tiempo en Berlín para recibir tratamiento médico. La recordamos con amor y gran respeto. Como Movimiento de Mujeres Kurdas en Europa, expresamos nuestro cariño hacia su familia, al pueblo kurdo y las mujeres.
Heval Hêvî ha representado a la personalidad revolucionaria en la liberación de las mujeres a lo largo de su vida con su compromiso, su resistencia y su gran corazón. Ella estaba a la vanguardia en muchas áreas diferentes de la lucha y era una fuente de moralidad y fortaleza para todos.
Heval Hêvî vino del pueblo Bthe de Bağyaka (Baqistan) en el distrito Savur de Mardin. Ante los incendios de la aldea y el sistema de vigilancia forzada impuesto en la década de 1990, fue forzada físicamente a abandonar su tierra a una edad temprana. En su corazón y en sus pensamientos, ella nunca olvidó sus raíces. Su ira contra la opresión del estado turco fortaleció su espíritu de lucha. Ella siempre quiso estar a la vanguardia y se unió a la lucha de liberación kurda cuando era joven. En el trabajo juvenil, su energía positiva la convirtió en una respuesta a la búsqueda de la libertad, en el trabajo con los medios se convirtió en la voz de un pueblo que es silenciado.
Heval Hêvî estuvo presa en Irán y Turquía en diferentes momentos. Su mayor sueño era ir a las montañas de Kurdistán. Todo su anhelo era por las montañas. Ella hizo realidad este sueño. Tomó las montañas y participó en la revolución de Kurdistán en la línea del frente.
Hêvî era como el agua, fluida y pura. Hizo su principio estar siempre allí y hacer lo que la vida revolucionaria requería de ella. Cuando el ISIS atacó a Rojava en 2014, ella dijo: "Ahí es donde tengo que ir". Junto con sus compañeras se convirtió, como su nombre, en la esperanza (Hêvî en kurdo) de las mujeres en Rojava y en todo el mundo.
No se dejó disuadir de su lucha contra el ISIS por una lesión en la pierna que había sufrido en Til Kocher al principio. Después de un breve tratamiento, volvió al frente. Un año después fue herida de gravedad cerca de Serêkaniyê por una mina colocada por el ISIS. Aún quedaba mucho por hacer en su país, pero las lesiones que sufrió hicieron que el tratamiento integral fuera inevitable.
En mayo de 2017, vino a Europa y se sometió a un tratamiento médico difícil y prolongado en Alemania. Ella tuvo que someterse a varias operaciones. Pero incluso eso no le impidió sentirse responsable de su propia gente. Vivía en comunidad con la gente de la diáspora y era maestra y activista, liderando a su gente hasta su muerte. Ella le contó a la gente de Kurdistán, las mujeres y los niños que conoció, sobre su amor por su país.
Los pensamientos y la filosofía de Rêber Apo (Abdullah Öcalan) fueron una forma de vida para Heval Hêvî. La implementación de sus ideas en todas las áreas de la vida fue una lucha interminable para ella. Hêvî trabajó para la revolución y la construcción del confederalismo democrático. Era una luchadora incansable y la esperanza de sus compañeros. Ella era una mujer de acción. Esta era su lealtad a los mártires, su creencia en la revolución y su amor por la compañía. En este gran camino se unió a la caravana de los mártires.
Heval Hêvî, nuestra compañera y esperanza, vivió sin descanso y con gran entusiasmo. Ella desafió la muerte varias veces. Ella continuará mostrándonos el camino. Ella era la compañera de Rêber Apo y de mujeres como Sara. Damos nuestra palabra de que continuaremos su lucha hasta la victoria".
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