TJK-E: "Tomad las calles y defended la revolución de Rojava"

"Todas las luchas por la justicia y la liberación del mundo resuenan en la revolución de Norte y Este de Siria. Es a nuestros verdaderos aliados, las fuerzas de la libertad, por lo tanto, a quienes hacemos un llamamiento hoy".

El Movimiento de Mujeres Kurdas en Europa (TJK-E) ha llamado a la resistencia contra la inminente invasión de Norte y Este de Siria por parte del estado turco.


A continuación reproducimos el comunicado:

“Desde el 2012, con el  liderazgo de las mujeres, el pueblo de Norte y Este de Siria ha estado construyendo un sistema social que permite una vida en paz, radicalmente democrática y con libertad de género para todos los grupos étnicos, religiosos y culturarles de la región. Esta organización autónoma fue creada gracias a la fe en la democracia, la libertad y la solidaridad entre los pueblos. Liderando la lucha contra el ISIS,  esta autoorganización estableció un clima de seguridad y estabilidad, permitiendo a los pueblos vivir colectivamente y enfrentar el futuro con esperanza, a pesar de las políticas de guerra aplicadas por las potencias hegemónicas a nivel global y regional, que protegen el status quo,  tratando de atizar el conflicto étnico y religioso. Las alternativas democráticas, construidas a pesar de los ataques, el desplazamiento, y los embargos económicos, han hecho imposible que las fuerzas capitalistas pudieran hacer valer sus intereses en la región. Son una espina clavada para aquellos que quieren imponer el autoritarismo, la dependencia y la explotación en la región y sobre los pueblos de Oriente Medio.

La invasión del estado turco de Afrin en enero de 2018 fue un ataque contra la esperanza, la convivencia entre las comunidades en la región y la democracia, simbolizadas por el autogobierno democrático en Norte y Este de Siria. En una flagrante violación del derecho internacional, el estado turco y sus aliados mercenarios mataron a más de 1.000 personas (principalmente civiles), y destruyeron sistemáticamente aldeas y lugares históricos y de valor religioso, así como la naturaleza y los recursos económicos de la población. Más de 300.000 personas fueron desplazadas por la fuerza. Los extremistas ocuparon sus casas y desde entonces trabajan con Turquía de forma diaria para perpetrar crímenes contra la humanidad. Saquean, secuestran a miembros de familias que no pudieron escapar, violan a las mujeres, torturan a los prisioneros, incendian los bosques y roban el patrimonio cultural local. Todas las estructuras autónomas de mujeres que habían sido construidas en el curso de 6 años fueron destruidas, al tiempo que la violencia contra las mujeres se convirtió en uno de los ejes de la política de ocupación.

Esta vez, Erdogan ha estado tratando de conseguir que la comunidad internacional se muestre de acuerdo con él y permita una ocupación turca de toda la zona de Norte y Este de Siria. Sin embargo, el autogobierno democrático de Norte y Este de Siria ha podido impedir un ataque turco hasta ahora con ingentes esfuerzos diplomáticos y ha implementado todos los pasos del acuerdo con Washington y Ankara para el establecimiento de la llamada zona de seguridad en las últimas semanas. Sin embargo, los acontecimientos de los últimos días claramente muestran que Erdogan y el fascista estado turco nunca se habían apartado de los planes de invasión de Norte y Este de Siria. El presidente de EEUU, Donald Trump, a través de sus últimos comentarios, también ha mostrado que la comunidad internacional está de hecho de acuerdo con este ataque.

Tras una conversación telefónica entre Erdogan y Trump, la Casa Blanca anunció que las Fuerzas de la Coalición Internacional se retirarían de la región y que la responsabilidad de luchar contra los restos del ISIS sería transferida a Turquía. Para aquellos que han estado liderando la batalla contra el ISIS sobre el terreno, transferir la responsabilidad de luchar contra el ISIS precisamente a los que han estado apoyando al grupo terrorista en todo momento – logística e ideológicamente, con armas, reclutamientos y acuerdos de paso por frontera- es una declaración de guerra contra todos los valores de la humanidad. Un ataque como éste no solo no significa que al igual que con la ofensiva de Turquía en Afrin, miles de civiles serán asesinados y cientos de miles serán desplazados (entre ellos, las personas que ya han pasado por la misma situación). Una operación como ésta también pondrá en peligro todas las estructuras democráticas alternativas que han sido construidas en la zona para construir la libertad, paz, justicia y liberación de las mujeres de todos los pueblos de la región. Los gobiernos permanecen callados a la luz de estas amenazas concretas en una clara demostración del hecho de que consideran peligroso para el sistema patriarcal opresor permitir que la revolución de las mujeres se pueda extender.

El pueblo kurdo, bajo el liderazgo de Öcalan, tienen un legado de 40 años de organización y autodefensa. De la misma manera, las SDF han declarado lo siguiente:

‘Como Fuerzas Democráticas Sirias, estamos decididos a defender nuestra tierra, sea cual sea el coste’.

Los pueblos kurdo, sirio, turcomano, armenio, asirio y siriaco de la confederación de norte y este de Siria, habiendo podido sobrevivir al peor tipo de ataques, están por lo tanto preparados para defenderse una vez más. En particular las mujeres, hemos aprendido a defendernos: la defensa de nuestra tierra, de nuestro pueblo, la defensa de lo que somos. La heroica lucha de las Unidades de Defensa de Mujeres (YPJ) ha ejemplificado para todas las mujeres del mundo que la autodefensa es la única garantía  para una vida en libertad. Los estados permanecen en silencio, porque son conscientes del modelo alternativo que estamos construyendo en Norte y Este de Siria, un modelo alternativo al sistema capitalista patriarcal que ellos representan. Sabemos que nuestros aliados no son los gobiernos, los estados y sus ejércitos, sino todas las mujeres, que se levantan en todas partes del mundo  para derribar el patriarcado. Nuestros aliados son las fuerzas que construyen un mundo diferente día a día y trabajan para defenderlo.

Todas las luchas por la justicia y la liberación del mundo resuenan en la revolución de Norte y Este de Siria. Es a nuestros verdaderos aliados, las fuerzas de la libertad, por lo tanto a quienes hacemos un llamamiento hoy, estamos juntos en esta lucha.

¡Tomad las calles, defended la revolución de las mujeres en Norte y Este de Siria!