Diez civiles más secuestrados en Afrín, ocupada por Turquía

El ejército turco y sus mercenarios aliados continúan sus violaciones en la ciudad de Afrín, en el norte de Siria, que está ocupada desde 2018.

Según la información recibida de fuentes locales, la Policía Militar, un aparato criminal paramilitar establecido por el Estado turco en las regiones ocupadas, secuestró a seis ciudadanos en el distrito de Jindires, en Afrín. Los detenidos fueron trasladados al centro de detención de Marat, en Afrín.

Según informes, se exige a las familias de los detenidos un rescate de 2 mil dólares por la liberación de cada uno de ellos.

La Organización de Derechos Humanos-Afrin informó que hace una semana, mercenarios respaldados por Turquía secuestraron a Mihemed Henan (37) frente a la casa de su tío en el barrio de Ashrifiye de Afrin y lo llevaron a un lugar desconocido.

Por otra parte, los mercenarios secuestraron a Mihemed Dawud (38), residente de la aldea de Jala en el distrito de Rajo, de una casa en el barrio de Ashrafiyah hace un mes.

Mistefa Şaban (40) y Xelil Şêx Sidi, de la aldea de Badina, en el distrito de Mabeta, también fueron secuestrados por las fuerzas de ocupación.

Según la Organización Siria de Derechos Humanos, al menos 10.332 personas fueron secuestradas y 463 fueron asesinadas entre 2018 y abril de 2024.

El cantón de Afrín es el más occidental de Rojava y del norte y este de Siria, donde vivían 200.000 personas de etnia kurda. Aunque la población era mayoritariamente kurda, allí vivían diversos grupos religiosos, entre ellos yazidíes, alevíes y cristianos, además de musulmanes suníes.

El 20 de enero de 2018, Turquía lanzó ataques aéreos contra 100 localidades de Afrín, como inicio de una invasión que denominaron "Operación Rama de Olivo".

La Fuerza Aérea Turca bombardeó indiscriminadamente a civiles y posiciones de las YPG/YPJ, mientras que facciones y milicias organizadas bajo el paraguas del Ejército Nacional respaldado por Turquía llevaron a cabo un asalto terrestre.

El 15 de marzo, las milicias apoyadas por Turquía habían rodeado la ciudad de Afrín y la habían sometido a bombardeos de artillería. Un ataque aéreo turco alcanzó el único hospital en funcionamiento de la ciudad y mató a 16 civiles.

Las y los civiles huyeron y las SDF se retiraron, y el 18 de marzo Turquía ocupó de facto Afrín. Entre 400 y 500 civiles murieron en la invasión, en su gran mayoría como resultado de los bombardeos turcos. Otros civiles fueron ejecutados sumariamente en el terreno.

Antes de la invasión turca, Afrín había sido una de las zonas más pacíficas y seguras de Siria, y prácticamente nunca había entrado en combate durante la guerra civil, salvo en ocasiones en que se producían escaramuzas entre las YPG/YPJ y las fuerzas yihadistas en sus fronteras. Como resultado, Afrín ofrecía un refugio pacífico a más de 300.000 desplazados internos procedentes de otras partes de Siria.