A pesar de los repetidos llamamientos de la Administración Autónoma del Norte y Este de Siria, las Naciones Unidas y las instituciones afiliadas no han presentado una solución para la apertura del paso fronterizo de Til Koçer. Debido al bloqueo de la ayuda humanitaria, cientos de personas que viven en los campamentos de refugiados de la región han atravesado tiempos difíciles.
El co-presidente de la Oficina de Migrantes y Refugiados de la Administración Autónoma del Norte y Este de Siria, Şexmus Ehmed, evaluó el problema para ANHA y habló de una crisis humanitaria en los campamentos. Afirmó que el cierre del cruce fronterizo de Til Koçer afecta negativamente a millones de personas que viven en el norte y el este de Siria, y agregó: “Ninguna organización humanitaria ha expresado su reacción al cierre del cruce de Til Koçer. En un período en el que los casos de coronavirus aumentan cada vez más en la región, las personas atraviesan tiempos difíciles debido al cierre de los cruces fronterizos. La situación es terrible, especialmente en los campamentos".
A pesar de que la Administración Autónoma ha tomado serias medidas contra el coronavirus, no es posible llevar a cabo una lucha efectiva contra la pandemia ya que incluso la ayuda de la Organización Mundial de la Salud (OMS) no puede acceder a la región debido a los cruces fronterizos cerrados, destacó Şexmus Ehmed.
Al informar sobre las medidas tomadas por la Oficina de Migrantes y Refugiados, Ehmed registró que establecieron centros de cuarentena y realizaron pruebas de Covid-19 en los campamentos.
Ehmed comentó que las instituciones internacionales ignoran los territorios de la Administración Autónoma en todos los aspectos y continuó: “Se acerca el invierno y ya se están experimentando condiciones desafiantes en los campamentos. Las carpas no están listas para la temporada de invierno. Todavía no se podía suministrar gas y gasoil. Preparamos una lista de requisitos y queremos completar todos los preparativos antes del invierno".
Şexmus Ehmed indicó las consecuencias adversas causadas por el cierre del cruce fronterizo de Til Koçer: “El cierre del cruce fue ordenado por el Consejo de Seguridad de la ONU. Rusia y el gobierno de Damasco obligaron a la ONU a tomar esta decisión en aras de los intereses del estado turco. El cierre del paso fronterizo de Til Koçer, que era el elemento vital de la región, ha afectado negativamente a cientos de miles de personas, especialmente a las que viven en campamentos. Aunque la Administración Autónoma ha realizado serios esfuerzos para encontrar caminos alternativos, la ONU y las organizaciones humanitarias no cubrieron las necesidades fundamentales de los migrantes”.
Dirigiéndose al Consejo de Seguridad de la ONU, la Unión Europea y otras instituciones internacionales, Ehmed pidió que se ejerza presión sobre los países para que repatrien a sus ciudadanos que viven en el campamento Hol. Destacó que las instituciones internacionales deben apoyar este proceso de repatriación.
Şexmus Ehmed pidió la apertura del paso fronterizo de Til Koçer para evitar la escalada de la crisis humanitaria en la región.