Mercenarios de Feyleq al-Sham afiliados al Estado turco secuestraron a 14 civiles, entre ellos mujeres, en el pueblo de Îska en Afrin.

Fuentes de la región identificaron a los civiles secuestrados: Mihmed Eli Osman (24), Hesen Îbo Îbiş (50), Bekir Nûrî Berekat (30), Selha Nûrî Selha (40), Fadil Ebdulrehman (30), Welîd Hayder Mamo (45), Mesûd Îbrahîm Mamo (40), Ednan Omer Îbo (56), Cemal Mihmed Alo (35), Ehmed Macid Remo (35), Hesen Sami Bazur (23), Binevş Omer Îbiş (50), Esûm Omer Îbiş (50), Bişûr Sibhî (30).

El 4 de noviembre, la inteligencia y los mercenarios del ejército turco, la llamada "policía militar", secuestraron a dos civiles de edad avanzada en el pueblo de Gemruk, en Mabata.

El 3 de noviembre, el Estado turco secuestró a 3 mujeres en Suluk, en la provincia de Girê Spî.

El Estado turco ha creado un régimen de terror y ha enviado mercenarios en todas las regiones que ha ocupado, especialmente en Afrin, ocupada desde marzo de 2018. Crímenes como el secuestro, la ejecución, la tortura, el saqueo, el secuestro forzado se han convertido en algo cotidiano en la ciudad, que se ha transformado sistemáticamente en una zona de crímenes de guerra.