Ahmet Karamus declaró que respaldan el llamamiento de Öcalan por una "Paz y una Sociedad Democrática". En declaraciones a ANF, explicó: "El objetivo principal de este llamamiento es establecer el marco legal para las demandas políticas del movimiento kurdo dentro de una transformación democrática que reconozca las diferentes identidades en la legislación turca, amplíe las libertades, garantice derechos sobre la base de la igualdad y la justicia, y materialice este proceso mediante una reestructuración."
El llamamiento por una resolución pacífica y democrática
Karamus destacó que el llamamiento para una solución pacífica y democrática de la cuestión kurda podría tener consecuencias significativas. "Las demandas de reconocimiento de la identidad, la lengua y los derechos culturales kurdos, así como su estatus regional, están directamente vinculadas a la democratización y la transformación legal de Turquía. Este asunto debe resolverse en paralelo con el proceso de democratización del país, asegurando derechos iguales para el pueblo kurdo. Por ello, la identidad kurda, sus derechos culturales y otras demandas deben garantizarse dentro de un marco legal basado en la justicia social y la igualdad", explicó Karamus.
El movimiento kurdo asume su responsabilidad
Karamus señaló que los movimientos políticos kurdos de todas las regiones apoyan este llamamiento y que la resolución de la cuestión en el Kurdistán del Norte afectará directamente a la situación en el Kurdistán del Sur y en Rojava. Apreció las declaraciones de actores políticos kurdos que expresaron su disposición a contribuir al proceso: "Este proceso no concierne solo al Kurdistán del Norte. Başûr (Kurdistán del Sur), Rojava y Rojhilat también se ven afectados. Los movimientos políticos kurdos deben unirse en torno a soluciones comunes y contribuir al desarrollo de un proceso más sólido."
Karamus agregó: "Queremos que nuestros partidos políticos en Bakur (Kurdistán del Norte), nuestros líderes de opinión y todas las dinámicas sociales adopten este proceso. Nadie debe sentirse sin esperanza. Debemos apoyar este proceso con gran moral y motivación. Consideramos que este llamamiento ofrece una perspectiva que conduce a la paz y la resolución. El objetivo principal para resolver la cuestión kurda es garantizar la paz y el diálogo, construir una sociedad democrática y abrir el camino para una política democrática."
La postura de los actores internacionales y la UE
Al evaluar la posición de la Unión Europea sobre el asunto, Karamus afirmó: "La UE aún no ha emitido una declaración institucional, pero muchos Estados miembros han expresado su apoyo a este proceso. El apoyo internacional es crucial para que Turquía resuelva este problema de manera democrática. Ahora la pelota está en el tejado de Turquía. Una transformación legal y democrática de este proceso puede lograrse mediante mecanismos de presión por parte de actores internacionales."
Karamus subrayó que instituciones internacionales como la UE y las Naciones Unidas deben ejercer la presión necesaria sobre Turquía para acelerar el proceso. "Este ya no es solo un problema interno de Turquía, sino que se ha convertido en una cuestión global. Deben tomarse medidas concretas para reconocer los derechos del pueblo kurdo dentro del marco del derecho internacional", declaró el copresidente del KNK.
Es necesario avanzar sobre la base de la democracia y la ley
Karamus insistió en que Turquía debe implementar reformas democráticas en relación con la cuestión kurda y agregó que estas reformas son necesarias tanto para reconocer los derechos del pueblo kurdo como para democratizar la sociedad. Señaló que es esencial llevar a cabo reformas legislativas en el parlamento y establecer comités con este propósito para preparar una base democrática.
Karamus destacó la importancia de avanzar en este proceso no solo para garantizar la paz social, sino también para definir el rumbo de la cuestión kurda en la región. "Este proceso puede servir como modelo y como un camino único hacia la paz, no solo para los pueblos de Turquía, sino para todos los pueblos, incluidos los kurdos, uniéndolos en torno a una visión democrática común", concluyó.