Cahit Rubari nació en 1942 en la aldea de Cibrî, en el distrito Şêrawa de Efrín. Durante la década de los noventa, en la región Efrín-Alepo-Damasco, se encontró con el líder del pueblo kurdo Abdullah Öcalan.

"Abrió el camino a una nueva vida y a la revolución"

Hablando con ANF, Rubari, en cuya mente y memoria todo el proceso de la "resurrección desde las cenizas" del pueblo kurdo está profundamente arraigado, conversó acerca de sus días con Öcalan:

"El pueblo kurdo pasó por la resurrección y pronto se convirtió en el escenario de una nueva vida. La historia del resurgimiento y la búsqueda del verdadero núcleo de este pueblo, llegó a florecer en este siglo 21, razón que lo llevó a la Revolución Rojava hasta esta etapa. Es este el verdadero núcleo. La gente de Siria del Norte están encontrando un nuevo arraigo de la vida.

Nos absorbimos en las discusiones incomparables. Su magnífica personalidad abrió también nuevas puertas en mi propio carácter. Siempre deseé conocerlo. La primera vez que lo vi fue en los años noventa. Su personalidad, su postura y sus discursos dejaron una profunda impresión en mí. Hablamos mucho y en nuestras conversaciones discutimos asuntos relativos al Kurdistán y al pueblo kurdo. Los valores sociales y culturales de la gente, y cómo tomar el destino en nuestras propias manos, siempre estuvieron en nuestra agenda esos temas. ¿Se puede hablar de diferencias o cambios entre el tiempo que pasamos juntos en los años noventa y la era actual? La búsqueda de Öcalan en Siria abrió una nueva era de resurgimiento para los kurdos. Fue una época en que los kurdos y el Kurdistán se vieron privados de su existencia, y flotaron al borde de la aniquilación total. Estos cambios revolucionarios que tienen ahora lugar en Rojava, 20 años de desarrollo más tarde, es de hecho la resurrección misma del pueblo kurdo y marca la época del despertar del sueño de mil años. Era el momento en que el deseo de libertad se alcanzaba irreversiblemente.

Durante todo el proceso de la revolución, la única base sólida ofrecida fue de nuevo el proyecto actual de los kurdos. En Turquía, en el transcurso del tiempo, se produjeron innumerables gobernantes y golpes militares. Nuestros recuerdos y los acontecimientos de los últimos 20 años hablan mucho. Un pueblo que sufrió constantes genocidios y negación, sólo podía alcanzar la verdad y su propia alma verdadera, sólo con la ayuda de magníficas personalidades. Y sólo con la percepción de los líderes es esto factible. El Líder de la Libertad, Öcalan, lo hizo posible en Siria, donde pueblos de diferentes etnias están viniendo ahora juntos y determinan su propio destino, realizando este producto de un proceso de años. La filosofía que estoy hablando, siempre ha iluminado nuestro camino y siempre voy a considerar esta filosofía sagrada.

Era de noche, cuando tuve un día algunos visitantes procedentes de Líbano. Estábamos sentados en la mesa de comedor, delante de nosotros había mucha comida. De repente sonó el teléfono, me comunicaban que Öcalan había sido puesto bajo custodia. Me sacudió los huesos. E incluso hasta hoy es demasiado difícil describir mis sentimientos y ruptura de esos momentos. Las palabras no lo pueden describir. Mis ojos parecieron quedar ciegos durante cuarenta días seguidos, y mi corazón no pudo soportar este cautiverio.

La salida de Öcalan de Siria y su cautiverio eran insoportables. En Alepo, Damasco y en todas partes Öcalan había puesto el pie, la gente se levantó para la resistencia. Y también los pueblos de todo el mundo no podían estar de acuerdo con este complot internacional. Era algo que, de ninguna manera, podía ser aceptado. Pero aún no era un juego fácil para empujar a Kurdistán y Oriente Medio en el olvido, ya que Öcalan ya había entregado los valores de la humanidad y la historia a los pueblos. Hay razones detrás de esta resistencia actual muy debatida y alabada internacionalmente de los kurdos en Siria. No lucharon contra las pandillas de ISIS al azar. No hay que olvidar que a los ojos de los kurdos, los valores de la humanidad son muy valiosos e importantes".

"Él creó una maravillosa nueva vida"

Rubari dijo: "Ellos planeaban borrar a todo un pueblo en la persona de Öcalan, pero la gente quiere ahora poder respirar libremente, lo que los kurdos buscan después es una revolución de la mentalidad. Se convierten en una oportunidad para determinar la vida de los pueblos árabes, cristianos y sirios, así, exigimos la libertad inmediata de Öcalan. Nosotros queremos verlo con nosotros y en nuestra patria el Kurdistán. Ocalan creó una vida maravillosa, y fue incluso antes de salir Siria, que ya estaba buscando un camino hacia una solución política".

Rubari explica que él visitó una vez el lugar de nacimiento de Öcalan y señaló: "Fui a Amara, donde nació Öcalan, y también en innumerables ocasiones intenté visitarlo en la prisión de Imrali, pero fue rechazado cada vez por razones políticas. También conocí a Mehmet Öcalan y hablamos, discutimos profundamente la percepción de la libertad del pueblo kurdo y el derecho a una nueva vida, y la noción que compartimos fue que tarde o temprano la solución de la guerra, las crisis y de los ciegos enquistados, tomará la forma de los pueblos de Oriente Medio y en particular de los pueblos de Siria, quienes han saboreado el dulce aire de la libertad, nuestra esperanza siempre fue vivir en libertad, nada será en vano".