El Movimiento de Mujeres Libres (TJA) emitió un comunicado en el que pedía una acción inmediata para detener la campaña genocida del estado turco que busca invadir el norte y el este de Siria, que se desarrolla en medio de numerosos casos de crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.

La declaración incluye lo siguiente;

“Turquía y los grupos afiliados están llevando a cabo fuertes crímenes de guerra en el norte y el este de Siria desde que comenzaron la agresión de ocupación el 9 de octubre, incluidas ejecuciones en masa y ataques mortales contra civiles. Con estas agresiones del régimen de la República de Turquía, el sistema confederal, de mujeres igualitarias y ecologistas está siendo atacado y el régimen quiere reubicar a los mercenarios yihadistas en las áreas que quieren limpiar de los kurdos y otros pueblos que viven en paz.

Miles de civiles tuvieron que huir de sus hogares, cientos de personas resultaron heridas y murieron debido a la agresión del ejército turco que desplegó sus elementos de artillería y ataques a lo largo de la frontera de Rojava.

Según las cifras del Comité de Salud de Rojava publicadas el 19 de octubre, 239 civiles perdieron la vida y 770 civiles resultaron heridos debido a los ataques que comenzaron el 9 de octubre. Según las cifras de la Media Luna Roja Kurda (Heyva Sor a Kurd) que solo estaban registradas en los hospitales, 210 civiles heridos y 74 civiles perdieron la vida. Según estas cifras, un niño de 3 años y un civil de 73 años se encuentran entre los muertos y la edad promedio de los civiles que han perdido la vida es de 26 años.

Además, el 20 por ciento de las personas que perdieron la vida son mujeres. Entre los niños heridos hay algunos cuyas pieles se han quemado profundamente. La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas ha declarado que están llevando a cabo una investigación sobre el presunto uso de armas químicas contra civiles.

Los centros y pueblos de Nusaybin, Kızıltepe, Ceylanpınar, Akçakale y Suruç ubicados en la frontera con el norte de Siria también sufren la ocupación e incursión de Turquía.

Según las declaraciones de la población local, ha habido entre 50 y 60 disparos de artillería solo en Nusaybin, donde 12 personas perdieron la vida y más de 70 civiles resultaron heridos por ataques de artillería. En Akçakale, un bebé de 9 meses con otra persona perdieron sus vidas, en Suruç 2 personas y en Ceylanpınar 2 niños perdieron la vida y hay decenas de heridos.

Con la ocupación del norte y el este de Siria, muchas minorías étnicas y religiosas diferentes están amenazadas y es obvio que las agresiones son contra el sistema de paradigma democrático, igualitario y de mujeres libres en el norte y el este de Siria.

El 12 de octubre, un convoy de civiles fue atacado en Girê Spî y la secretaria general del Partido por el Futuro Sirio, Havreen Khalaf, fue asesinada por mercenarios. La circulación de un video que muestra el cuerpo de Havreen Khalaf por los medios de comunicación de los mercenarios es una clara señal de los brutales ataques contra las mujeres.

Este es nuestro llamado para detener esta guerra que contradice los acuerdos firmados por todas las partes (OTTOWA, KYOTO, CEDAW, Declaración Universal de Derechos Humanos, Acuerdo de Derechos de los Niños de la ONU, Convención de Ginebra sobre la Guerra, ONU). Es un deber humanitario llamar a la movilización por la paz en lugar de llamar a la movilización para la guerra".

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