Desde hace dos meses, los familiares de los y las mártires protestan en el paso fronterizo de Sêmalka, en Rojava, exigiendo que se les entreguen los cuerpos de sus hijos e hijas. La protesta fue iniciada por el Consejo de Familias de Mártires de la región de Cizîrê y cuenta con el apoyo de numerosas instituciones de la región autónoma del norte y el este de Siria.
La protesta es para recibir los restos mortales de cinco guerrilleros y guerrilleras que murieron en una emboscada de las fuerzas especiales del partido gobernante del Kurdistán del Sur, el KDP, en la noche del 28 al 29 de agosto. La combatiente del YJA-Star Nesrin Temir y el combatiente de la HPG Yusif Ibrahim eran de Rojava. Se desconoce dónde están los cuerpos. El KDP se niega a entregarlos, una situación intolerable para las familias.
Hoy, los activistas de las "Madres de la Paz" quieren intentar una vez más cruzar la frontera de Rojava al Kurdistán del Sur y hacer su demanda directamente a los líderes del KDP. Intentos similares ya han fracasado varias veces en los últimos dos meses.
La acción de protesta de hoy también es apoyada por los empleados del comité de salud de Cizîrê. La co-presidenta del comité, Ikbal Salih, dijo en el paso fronterizo de Sêmalka: "Los mártires son nuestro honor. Nunca los dejaremos atrás. Como Comité de Salud y como Heyva Sor a Kurd, condenamos las acciones ilegales del Gobierno Regional del Kurdistán Sur y exigimos la entrega de los mártires. Insistimos en ello. Continuaremos nuestra acción hasta que nos entreguen sus cuerpos. Exigimos la unidad de los pueblos contra esta traición".