El periodista revolucionario Murat Kuseyri, fallecido el 30 de septiembre a causa de un tumor cerebral, fue conmemorado por sus amigos en un acto celebrado en el Centro Cultural Kurdo de Estocolmo.

Su familia, sus colegas, el personal del Centro Comunitario Kurdo, gente de la izquierda de Turquía y muchos amigos que luchan por la democracia estuvieron presentes en la conmemoración.

La conmemoración comenzó con un minuto de silencio por todos los periodistas que lucharon por una sociedad democrática y perdieron la vida, seguido de un mensaje enviado por la coordinación general de difusión de nuestra agencia.

A continuación, Zeliha Kuseyri, la esposa de Murat Kuseyri, tomó la palabra. "Significa mucho para mí que Murat se haya ganado el corazón de tanta gente con su cámara y su pluma, y que tanta gente se haya reunido gracias a él. Ayudó a todos, Murat nunca buscó la fama. Esto también lo ha visto. Fue amenazado muchas veces, pero siguió trabajando como periodista para ANF".

En la conmemoración se presentó un pase de diapositivas. Más tarde, el periodista y político Kurdo Baksi, que trabajó con Kuseyri, tomó la palabra.

Expresando que la pérdida de Murat Kuseyri deja un vacío insustituible, Baksi habló de sus años con él y dijo: "Lo importante para mí era su verdadera identidad periodística, su postura revolucionaria y su búsqueda de la verdad. Hicimos mucho trabajo juntos. Gracias a su determinación, descubrimos muchos asuntos sucios relacionados con Erdogan y el Estado turco. Todo el mundo lo vio. Murat era un internacionalista. Estaba del lado de todos los segmentos del mundo que luchaban por la democracia para sus propios pueblos. Le encantaba reunir a la gente. Es duro perder a un periodista, pero él era mi hermano más que nada".

Ayşe Göktepe también tomó la palabra en nombre de la Asamblea de Mujeres Kurdas de Amara y dijo que Kuseyri tenía una gran fe en el movimiento de las mujeres y que su muerte es una gran pérdida para ellas en este sentido. Göktepe dijo: "Siempre buscamos a Murat en todos nuestros trabajos y acciones como movimiento de mujeres".

Saniye Akdağ dijo: "Murat nunca compraba vestidos nuevos y caros en una tienda. Enviaba todo su dinero a los encarcelados por la lucha por la democracia en Turquía y a los jóvenes que estudiaban o necesitaban ayuda. Se ocupaba de las mujeres y los niños. Era una persona que trasladaba todo lo que decía a su vida".

Amineh Kakabaveh, diputada independiente en el Parlamento sueco, dijo: "Hemos perdido a un camarada revolucionario, un muy buen periodista". Añadió que Kuseyri siempre estuvo en el terreno de los encarcelados, de los derechos de las mujeres, de la libertad de Abdullah Öcalan, de Demirtaş. Kakabaveh añadió que era una persona sensible que incluso les animaba a ser la voz de los pueblos en el parlamento.

'Él nos trasladaba la voz de la calle y nuestra voz a la calle'

La diputada del Partido de la Izquierda Sueca Lorena Delgado Varas, originaria de Chile, también compartió sus sentimientos: "Lo que más me gustaba de Murat era que estaba en la calle pero también en el parlamento. Nos trasladaba la voz de la calle, y nuestra voz a la calle. Me entrevistó muchas veces sobre el pueblo chileno. Se interesaba mucho por la resistencia en nuestro país. Necesitamos desesperadamente periodistas como Murat en Suecia".

En la conmemoración, la hija adoptiva de Kuseyri, Nergiz Yıldız, el presidente de la Federación Aleví, Nevin Kamilağaoğlu, Salih Imzaci, que trabaja con Kuseyri, Mirhem Yiğit, Karwan Sait, el miembro de la Asociación Aleví Ali Çağan, el artista Kemal Görgü y el escritor Hesene Alee también tomaron la palabra y transmitieron sus sentimientos.