UNICEF: Casi 12.000 niños muertos o heridos en Siria en la última década

Casi 12.000 niños muertos o heridos en Siria en la última década, según datos verificados, un promedio de más de tres niños por día.

La guerra en Siria ha dejado la vida y el futuro de una generación de niños pendiendo de un hilo, advirtió UNICEF el miércoles, mientras el conflicto se acerca a los 10 años. La situación de muchos niños y familias sigue siendo precaria, y casi el 90% de los niños necesitan asistencia humanitaria. Sólo en el último años hubo un aumento del 20%.  

“Este no puede ser solo otro dato sombrío que pasa por la visión periférica del mundo mientras los niños y las familias en Siria continúan luchando”, expresó la directora ejecutiva de UNICEF, Henrietta Fore y agregó que “Las necesidades humanitarias no pueden esperar. La comunidad internacional debe hacer todo lo posible para lograr la paz en Siria y movilizar el apoyo para sus niños".

Una década de conflicto ha tenido un impacto asombroso en los niños y las familias en Siria:

- En el último año, el precio de la canasta de alimentos promedio aumentó en más del 230 por ciento;

- Más de medio millón de niños menores de cinco años en Siria sufren retraso en el crecimiento como resultado de la desnutrición crónica;

 - Casi 2,45 millones de niños en Siria y 750.000 niños sirios más en los países vecinos no están escolarizados. El 40 por ciento son niñas;

- Según datos verificados, entre 2011 y 2020, casi 12.000 niños murieron o resultaron heridos; más de 5.700 niños, algunos de hasta siete años, fueron reclutados para los combates; más de 1.300 instalaciones y personal médico y educativo han sido atacados;

- El número informado de niños que muestran síntomas de angustia psicosocial se duplicó en 2020, ya que la exposición continua a la violencia, el shock y el trauma ha tenido un impacto significativo en la salud mental de los niños, con implicaciones a corto y largo plazo.

La situación en el norte de Siria es particularmente alarmante. En el noroeste, millones de niños siguen desplazados, y muchas familias han huido de la violencia varias veces, en busca de seguridad. Muchas familias se han tenido que re localizar hasta siete veces en la última década. Han sufrido largos invierno, luchando contra un clima severo, que incluye lluvias torrenciales y nieve, viviendo en tiendas de campaña, refugios y edificios destruidos o sin terminar. Más del 75 por ciento de las violaciones graves registradas en 2020 ocurrieron en el noroeste.

En el campamento de Al-Hol y en todo el noreste de Siria, 27.500 niños de al menos 60 nacionalidades, y miles de niños sirios asociados con grupos armados languidecen en campamentos y centros de detención. La violencia ha aumentado recientemente en Al-Hol, poniendo vidas en riesgo y destacando la necesidad de soluciones a largo plazo, incluida la reintegración en las comunidades locales o la repatriación segura de los niños a sus países de origen.

Además, el número de niños refugiados en los países vecinos, que continúan albergando generosamente el 83% del número total de refugiados sirios en todo el mundo, se ha multiplicado por diez, hasta los 2,5 millones desde 2012, lo que supone una presión adicional para las comunidades ya sobrecargadas